Romain Grosjean y Esteban Gutiérrez salieron desde la penúltima fila de la parrilla pero el piloto francés ganó posiciones, gracias al periodo con bandera roja causado por el choque entre Gutiérrez y Fernando Alonso, y terminó sexto.
Fue la primera vez que un equipo nuevo puntuaba en su debut desde que lo hiciera Mika Salo con el Toyota en 2002, aunque Steiner está por la labor de tocar de pies en el suelo.
"Pienso que nuestro plan es trabajar, pero no terminaremos sextos cada fin de semana, así que necesitamos ser cautos con nuestras expectativas," dijo Steiner antes del Gran Premio de Bahréin del próximo fin de semana.
"Creo que demostramos que se puede empezar un equipo nuevo y terminar en la mitad de la tabla. No fuimos últimos en Australia, y era uno de nuestros objetivos y no creo que seamos últimos este año.
"Que hayamos llegado tan lejos es una señal de que nuestro plan funciona.
"[Pero] no estamos siendo arrogantes con nuestro súbito éxito y tendremos carreras en las que lo haremos por debajo de lo esperado."
Steiner añadió que Gutiérrez dispondrá de un chasis nuevo por el choque a alta velocidad con Alonso.
"Algunas de las partes, por ejemplo el chasis, las enviamos a Europa para que las comprobaran y arreglaran porque no podemos hacerlo en Bahréin," explicó.
"Tenemos suficientes componentes para construir otro chasis, así que las usaremos. El chasis que está siendo reparando se enviará a Bahréin por avión para que tengamos un recambio.
"Los chicos tendrán que trabajar día y noche para que llegue a Bahréin, pero todo es posible. Tenemos pocos recambios pero son suficientes para ir tirando de nuevo, así que seguiremos trabajando."