por Estela D. Faciabén
Confiesa que de adolescente sólo leía literatura adulta e infantil, nunca juvenil. Hasta que siendo ya universitaria una amistad la instó a ver la adaptación cinematográfica de Los Diarios de la Princesa. Al poco tiempo leyó las novelas originales y aquello fue amor a primera vista: no sólo hacia Meg Cabot, sino también hacia la literatura juvenil en general. Según Stephanie, nunca antes se lo había pasado tan bien leyendo.
Desde entonces decidió dedicarse a la escritura, y, de hecho, hasta la fecha todos sus trabajos han girado en torno al arte de las letras: primero fue dependienta de una tienda de libros, luego bibliotecaria y ahora es una autora publicada.
Ha publicado Anna and the French kiss (Un beso en París en España) yLola and the boy next door, ambas novelas muy bien recibidas por el público en general. En la segunda reaparecen personajes de la primera.
Stephanie pertenece al club de las escritoras de pelo multicolor, junto con Laini Taylor y otras cuantas. Añade que le gusta escribir sobre besos y chicos monos, o besos con chicos monos… que, por cierto, no son su obsesión. Para nada.
Obra publicada en español: Un beso en París