Las alumnas del taller me recordaron muchísimo a las mías, con muchísimas ganas de aprender y cientos de miles de preguntas en la recámara. Solo espero haber sido capaz de satisfacer su curiosidad en el ratito que compartimos.
El segundo taller, el del domingo, consistía en aprender a tejer calcetines de formas diferentes, empezados por la puntera o la caña. Hicimos algunas muestras y grabamos un par de videos que pueden encontrar en mi canal de Youtube.
Quiero agradecer a Bea por su amistad y su confianza en mis capacidades. Y a todas las alumnas de los dos talleres por dejarse torturar por mi durante un fin de semana completo. Nos veremos el proximo año en Sevilla para otro taller con lanas de malabrigo :)