No importa si es verano o invierno, si hace sol o no, lo importante es estar moreno a los ojos de los demás. En los últimos tiempos ha nacido una nueva obsesión por lucir la piel bronceada, aunque sea a costa de rayos artificiales de las cabinas UVA, sin necesidad de tomar el sol. De aquí nace la tanorexia, un nuevo trastorno psicológico causado por esa obsesión con el color de la piel. Una preocupación excesiva en algunas personas que creen que su dermis nunca está demasiada morena -algo similar a lo que les puede ocurrir a las personas que sufren anorexia, que nunca ven su cuerpo en el peso idóneo-.
El problema llega cuando abandonas el cuidado de tu piel, abusas de los rayos UVA y sigues exponiéndolo al sol en estas cabinas con rayos artificiales sin ningún tipo de protecciónsolar. Llega un momento que el bronceado, más que aportar buen aspecto, puede suponer un problema de salud para la piel. Es un trastorno que está afectando a personas de ambos sexos y de todas las edades, aunque las principales afectadas de este trastorno suelen ser mujeres de entre 17 y 35 años. Según un estudio de Journal of the American Academy of Dermatology.
¿Cómo afecta a la piel este abuso de bronceado?
El principal efecto es un envejecimiento prematuro de la piel, con el paso de los años la piel será más seca, con arrugas, con un aspecto no acorde de la edad de esa persona, que ha expuesto su piel a los rayos del sol (o del UVA) en exceso. Pero los efectos negativos van más allá del envejecimiento de la piel.Una exposición abusiva sin ningún tipo de protección solar puede causar la aparición de manchas y arrugas en la piel, así como aumenta el riesgo de cáncer de piel. Así pues, no son pocos los riesgos que inclinan la balanza ante el simple hecho de estar bronceado por cuestiones estéticas.
Para más información, podéis leer esta entrevista al Dr. Dídac Barco -Dermatólogo enDermatek (Centro Médico Teknon)- realizada por Actualidad Saludable BCN.