Cumplimos 8 años en Desafío en la cocina, se dice pronto.
La verdad es que este reto vale un potosí, por su organización, sus administradoras, sus temas, sus pistas, sus apuestas... todo un mes viviendo una divertida aventura que no hace nada mas que enseñar y enseñar sobre cocina.
Tambien quiero hacer con esta receta un pequeño homenaje a todo el personal sanitario que se vuelca por ayudar en esta crisis que estamos pasando, una ayuda tan valiosa como es la propia vida y concretamente lo digo por nuestra Boss M Luz (Trasteando en mi cocina) que está día a día al pie del cañón velando por nuestra salud, así que esta tarta va por ti sobre todo por tu valentía y servicio que no tienen precio.
Si tuviera que nombrar todo lo que he aprendido en este desafío me bloqueaban el blog, no habría bastante memoria.
Macarons, crostata, flotatina, mont blanc, Tarta ópera, Makowiec, tarta tendencia, Rabo de toro, Wraps, Drip cake, Kuliviak, Runzas, Frittata, Cheddar bacon ranch pulls... y mil cosas mas.
Así que para estar a la altura del desafío de este mes por su cumpleaños, tarta helada, he decidido hacer esta rica tarta al whisky. No os perdáis este recopilatorio de Tartas heladas entrando AQUÍ.
La elaboración es un poco larga pero vale la pena, el resultado es espectacular, solo hay que organizarse bien y dejar cada elaboración para un día, asi no cuesta nada hacerla.
Tarta al whisky sin gluten ni lactosa
Ingredientes:
Para el bizcocho:
- 2 huevos.
- 60 gr de azúcar.
- 60 gr de almidón de maíz.
- 1/2 cucharadita de levadura química.
Para el almíbar:
- 30 ml de Agua.
- 30 ml de Whisky.
- 50 gr de Azúcar.
Para el relleno:
- 700 ml Nata sin lactosa (yo usé nata vegetal).
- 80 gr de azúcar.
- 3 Yemas de huevo.
- 70 gr Azúcar glass.
- 30 gr Azúcar invertido. Ver la receta pinchando aquí.
- 4 Hojas de gelatina.
- 30 ml Whisky.
Ingredientes de yema tostada al whisky:
- 3 Yemas de huevo.
- 100 gr de Azúcar.
- 100 ml de agua.
- 30 gr de almidón de maíz.
- 30 ml whisky.
- Azúcar morena para quemar.
Decoración:
- 300 ml de nata vegetal.
- 40 gr de azúcar.
- Crocanti de almendra.
Elaboración:
Se comienza con el bizcocho, se baten bien los ingredientes hasta que esté un poco espumosos.Se vierte en un molde cerrado engrasado del tamaño del desmontable, al ser la mezcla muy liquida así evitamos que se pueda salir por la unión del molde desmontable.
Se hornea a 180º C durante unos 10 minutos.
Se deja templar y se pasa al molde principal mientras se prepara el almíbar.
Se pone el agua y azúcar a hervir durante unos minutos.
Se agrega el whisky y se deja evaporar el alcohol.
Se pinta el bizcocho con el almíbar y se reserva.
Se prepara el relleno haciendo primero el sabayón.
Se pone la gelatina a hidratar en agua fría.
Se mezclan bien las yemas con el azúcar glas y el azúcar invertido hasta que esté muy cremoso y ligero.
Se ponen al baño maría sin dejar de batir y procurando que nunca alcance mas de 59 º ya que a los 60 cuajarían las yemas. Son 10 minutos mas o menos de batir y batir sin parar para que no se cuaje y endurezca, se quiere una crema suave pero no liquida. De vez en cuando, si la temperatura casi pasa de 59, se saca del baño y se sigue batiendo para que enfríe un poco y seguir formando el sabayón, así se va alternando para controlar la temperatura.
Al terminar, antes de que empiece a bajar la temperatura se añade la gelatina hidratada y escurrida.
Se monta la nata con el azúcar mientras templa el sabayón.
Se empieza a mezclar poco a poco con la nata con movimientos suaves.
Una vez todo mezclado se vierte sobre el bizcocho y se alisa bien la superficie.
Se mete en el congelador cubierto de film transparente.
Ya estamos al día siguiente, se hace la yema tostada poniendo el agua y azúcar a hervir.
Se mezclan las yemas con el almidón de maíz hasta tener una crema suave.
Se añade el whisky al almíbar para que hierva y pierda el alcohol.
Se deja templar un poco el almíbar antes de ir agregándolo a las yemas poco a poco sin dejar de mover.
Se vierte todo de nuevo al cazo y se calienta a fuego suave sin parar de remover, hay que tener cuidado porque empieza a cuajar en seguida.
Cuando se vea la textura de unas natillas se aparta del fuego y se cubre con film tocando la superficie para que no haga costra.
Cuando ya esté totalmente frío se saca la tarta del congelador y se cubre con la yema tostada.
Se cubre esta con azúcar morena y se quema con soplete hasta que carameliza.
Se mete de nuevo en el congelador cubierta con film.
Otro día mas y se monta la nata para la decoración.
Se decora la tarta al gusto con nata montada y almendra caramelizada. Ya se puede servir pero es mejor dejarla de nuevo en el congelador un poco mas y sacar unos minutos antes de servir para que el corte sea fácil.
Nos vemos en el próximo: