El licor, en vez de kirsch, pondría aguardiente, pero no, cambio de última hora, preferible ron, definitivamente usaría ron añejo y la fécula…. ¿y la fécula? ¡¡ que no tengo !!, pues hala, de coraje, la hago y no se la pongo. Vamos, que en definitiva, rehago casi íntegramente la receta básica a mi antojo.Paciencia, valor, todo casi preparado…y vamos al lio.
El resultado:El sabor (y como dirían los antiguos, cuando alguien se echa flores: “no tengo abuela”) delicioso, fantástico, de los pasteles más ricos que he preparado, tengo que decirlo…..La forma, me queda mucho, muchísimo que aprender y practicar para que quede una tarta perfecta a la vista. Quizás no serviría para una exposición, para una foto de revista (por muy buena cámara o fotoshop que se usara), ni tan siquiera para un buen blog, pero les puedo asegurar que está realmente riquísima.
¿Cómo la hice?Ingredientes:6 huevos XL, 100 grmos.de azúcar, una naranja, medio limón, 150 grmos. de harina especial para bizcocho, un sobre de levadura de repostería, 300 grmos.de almendras (malagueñas a ser posible), media tableta de chocolate negro especial para postres, 100 grmos de mantequilla, 250 grmos. de azúcar glas, guindas y una copa de ron añejo.Los pasos a seguir:Echar las almendras en agua caliente, pasados unos minutos, quitarles la piel y secarlas. Machacarlas en un mortero.En un cuenco mezclar 200 grmos. de almendras molidas con el zumo de la otra media naranja, reservar.En un recipiente de cristal al baño Maria, derretir el chocolate con la mantequilla.Cuando el chocolate y la mantequilla esté listo, agregar la mezcla de almendras y naranjas, remover y dejarlo enfriar en el frigorífico a fin de que se vaya solidificando un poco.Precalentar el horno a 200º C.En un bol batir a punto de nieve la clara de tres yemas de huevo.Mientras en un cuenco mezclar tres yemas de huevo con cien gramos de azúcar hasta que blanquee, añadir sin dejar de batir, la piel rallada de media naranja y el zumo.Agregar a ésta mezcla las claras montadas con movimientos envolventes y a continuación tamizar en la mezcla la harina junto con la levadura, removiendo con suavidad.Verter la mezcla en un molde redondo, untado con mantequilla, nivelarla y hornear durante treinta minutos (o hasta que el bizcocho, pinchándolo con un palito, éste salga seco).Sacar el bizcocho y dejarlo enfriar.En otro recipiente mezclar el resto de las almendras molidas con 50 grmos de azúcar glas, tres yemas de huevo y la piel rallada de un limón. Reservar.Cortar la tarta por la mitad (horizontalmente), humedecer los dos trozos con ron y untar el chocolate en la base inferior, recomponiendo nuevamente el bizcocho.Untar la base superior con la mezcla de yemas y almendras y volver a meter en el horno durante unos cinco minutos (sólo encendido por la parte superior, la opción de gratinado). Sacar del horno y dejarlo enfriar, durante ése tiempo montar el merengue, en ésta ocasión he preparado el llamado estilo “francés”: Para ello he usado tres claras de huevo a temperatura ambiente, un pelín de sal y 200 grmos.de azúcar glas.Echar las claras de huevo en un bol suficientemente grande, ya que después aumentarán mucho de tamaño. Batir enérgicamente con unas varillas junto con la sal hasta que adquieran consistencia, es decir, a punto de nieve.Dejar reposar el merengue unos minutos y comprueba que no queden restos de clara sin batir en el fondo para evitar que se baje.Añadir el azúcar poco a poco y sin dejar de remover, batiendo hasta que la mezcla quede brillante, espumosa y formen “picos”.Rellenar una manga pastelera con el merengue y adornar la tarta, dejando que se vea la crema de almendras y yemas. Quemar con un soplete de cocina el merengue y colocar las guindas……Esta tarta, es la “guinda” de una buena comida, una buena taza de té o café en una merienda…
¿Os cuento un pequeño secreto?: No tengo soplete de cocina, pido ayuda, un SOS a mi marido cuyo uno de sus hobbies es el bricolaje y sube de su cuidado y ordenado taller su soplete semi-profesional…. Por cierto, el ron que he usado es ron añejo Havana….y así se llama ésta preciosidad: Havana, la dulce, cariñosa y preciosa perrita de mi hijo.