Como acompañamiento podemos usar una suculenta ensalada y tenemos una comida completa. Así que vamos con la que preparé para el almuerzo de hoy.
Para la base:
-160 gr. de harina
-90 gr. de mantequilla
-2 o 3 cucharadas de agua helada
Para el relleno:
-420gr. de atún en conserva bien escurrido
-175gr.de requesón
-75 gr. de queso ricotta
-1 lata de pimiento rojo morrón
-3 huevos batidos
-3 cebollas pequeñas
Preparación:
Primero preparamos la masa quebrada. Ponemos la harina tamizada en un bol y le añadimos la mantequilla. Mezclamos con las yemas de los dedos durante 2 minutos o hasta que la pasta sea fina y desmigada. Añadimos casi toda el agua y seguimos mezclando hasta obtener una masa firme. Agregamos más agua si fuere necesario. Pasamos esta masa a una tabla enharinada y amasamos hasta que sea homogénea. Untamos un molde de 20cm. con mantequilla o aceite. Extendemos la masa hasta poder forrar con ella la base y los laterales del molde, la enrollamos en un rodillo y la vamos dejando caer sobre el molde. Recortamos los bordes y metemos la masa en la nevera durante 20 minutos.
Precalentamos el horno a 180º. Ponemos sobre la base unas legumbres secas para que la masa no suba al hornearla y metemos el molde en el horno durante 10 minutos, Retiramos del horno, desechamos las legumbres y volvemos a llevar al horno por otros diez minutos o hasta que veamos que la masa empieza a adquirir un color dorado. Retiramos y dejamos enfriar.
Seguimos con el relleno. Escurrimos bien el atún y lo troceamos. Mezclamos con una batidora de varillas el requesón, el queso ricotta y los huevos, durante 30 segundo o hasta que la mezcla sea homogénea. Incorporamos esta mezcla al atún, le añadimos los pimientos morrones troceados y las cebollas cortadas en juliana. Vertemos todo esto sobre la masa que teníamos horneada y lo volvemos a llevar al horno durante 30 minutos o hasta que el relleno este cocido.