Esta tarta de limón está elaborada con una delicada crema de limón y un ligero toque de acidez, que se funde perfectamente en el paladar dejando un toque de frescor.
Si queréis tenerla lista por la tarde, para la hora de la merienda, bastará con prepararla por la mañana temprano, cuajará bastante rápido.
Para esta receta necesitaremos hacer crema de limón, la cual podemos preparar previamente y tenerla en un recipiente hermético. Si pinchas en el enlace que dejo a continuación te enseñaré la manera de prepararla: "Crema de limón"
Teniendo la crema preparada empezaremos con la elaboración de la tarta, no te pierdas detalle:
Ingredientes:
Base:
-50gr. de mantequilla
-50gr. de azúcar
-100gr. de galletas dipo Digestive
Relleno:
-230gr. de queso graso (tipo Philadelphia)
- 2 huevos tamaño L (separada la claras de las yemas)
-100gr. de azúcar
-Ralladura de 3 limones
-150ml. de nata para montar
-Zumo de un limón
-3 cucharadas de agua
-15gr. de gelatina en polvo o bien 12 hojas de gelatina
Cubierta:
-zumo de un limón grande
-3 cucharadas de crema de limón
Preparación:
Primero preparamos la base para que se vaya endureciendo. Para ello derretimos la mantequilla con el azúcar en un cazo a fuego bajo. Le añadimos las galletas bien desmenuzadas e integramos bien los tres ingredientes. Con esta mezcla cubriremos el fondo de un molde desmontable redondo de 18 a 20cm. (Previamente engrasado). Apretamos bien la mezcla para que quede bien compacto. Dejaremos el recipiente en la nevera mientras preparamos el relleno.
En un bol ablandamos el queso, le añadimos las yemas de huevo ligeramente batidas, 50 gr. de azúcar y la ralladura de limón. Cuando ya esté bien mezclado añadimos la nata y batimos hasta obtener una crema parecida a las natillas.
Si la gelatina que vamos a utilizar es de lámina la pondremos a hidratar en un poco de agua. En un cazo pondremos el zumo del limón, el agua y la gelatina que hemos puesto a hidratar pero bien escurrida del agua. El cazo lo ponemos al baño maría y disolvemos completamente la gelatina. Reservamos y dejamos enfriar.
Por otro lado batimos las claras de huevo a punto de nieve con el azúcar restante.
Una vez tengamos la gelatina a temperatura ambiente la mezclamos con la crema de queso, con movimiento envolventes y por último agregamos las claras suavemente para adquirir una mezcla esponjosa.
Con una cuchara rellenamos el molde que teníamos reservado en la nevera, sacudimos un poco con suavidad para que la superficie quede uniforme. Dejamos 3 o 4 hojas en la nevera.
Por último ponemos al fuego el zumo de limón junto con la crema de limón y a fuego muy bajo, removemos hasta que esté bien mezclado. Dejamos templar y cubrimos la superficie de la tarta.
Y para acabar la decoramos con unas ruedas de limón y algo de nata.
¡A merendar!