¡Hola a tod@s!
Hoy os traigo un postre de los que apetecen detrás de comer, ya que es fresco y muy ligero. No sé vosotros pero a mi me encanta terminar una comida con un postre con un toque dulce y que aporte frescura. Esta receta tiene historia, me la dieron hace tiempo en un viaje que hice a Galicia. Recuerdo que era un restaurante típico, no demasiado llamativo, que son los que, en la mayoría de los casos, te suelen ofrecer la comida autóctona, con el ingrediente que más me gusta de esos lugares: recetas que pasan de una generación a otra.
Llegó la hora del postre y nos sugirieron la tarta de queso, tenía fama por aquellos lares de que estaba buenísima. Doy fe.
La cocinera, al escucharnos con nuestro acento andaluz, salió a saludarnos amablemente y accedió a darnos la receta de su tarta de queso. Qué bonito es cuando las cosas que gustan se comparten.
De verdad hacedla porque es súper fácil y está de muerte.
I N G R E D I E N T E S :
Para 6-8 personas
-200 ml de nata líquida
-1 tarrina de queso crema
-1 sobre de gelatina de limón
-2 cucharadas de azúcar
-1 plancha de bizcocho
-Mermelada o coulis de fresa, frambuesa o frutos rojos
P R E P A R A C I Ó N :
Lo primero es preparar la gelatina, así que en un cazo llevamos 1/4 l. de agua a hervir, apartamos del fuego y echamos el sobre de gelatina, removemos bien y le añadimos 1/4 l. de agua fría. Removemos y dejamos tibiar.
En un bol mezclamos el queso crema con el azúcar. Añadimos la nata, mezclamos bien y echamos a esta mezcla la gelatina tibia a casi temperatura ambiente (nunca caliente!!) Removemos todo muy bien y os quedará una mezcla más bien líquida. Echamos esta mezcla en un molde redondo forrado de papel de aluminio (de 22 cm de diámetro aprox.). Una vez relleno el molde le colocáis encima la plancha de bizcocho con el diámetro del molde, el bizcocho debe quedar justo encima de la mezcla, como si fuera una tapadera. Meter en el frigorífico unas 12 h.
Para desmoldar, ponéis un plato y le dais la vuelta al molde, de tal forma que la base de bizcocho quedará abajo. Es igual que darle la vuelta a una tortilla!! Retiráis el papel de aluminio con cuidado. Para decorar os sugiero que pongáis una capa de mermelada o coulis de fresa o de frutos rojos. Yo en esta ocasión le he puesto un coulis de frambuesa que me ha gustado más que con la mermelada porque es todavía más ácido y la combinación es perfecta para mi gusto.
Para hacer el coulis, ponéis 250 g de frambuesas en un cazo con 75 g de azúcar y 50 ml de agua. Cocéis unos 10 min. removiendo de vez en cuando. Trituramos y colamos. Dejamos enfriar y listo!!
El color del coulis de frambuesa es precioso y lo hará muy vistoso.
Esta tarta de queso es sin horno y se prepara muy rápido. Si queréis hacer la famosa cheesecake americana puse una receta buenísima: Tarta de queso al estilo de New York
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