Crochet y labores de ganchillo ya no van unidas a la imagen de la la abuelita con toquilla. El humilde crochet está de moda y se ha hecho un hueco en las pasarelas y talleres de los diseñadores, en todas sus versiones y colores, y no sólo en vestidos, arrasan los complementos. Pero cuidado, puede convertirse en un arma de doble filo, desde el colmo del estilo, pura tendencia, al el fracaso más absoluto.
Dress Code: Si no estás segura de tu aspecto, renuncia. El crochet requiere un gran estilo y una buena combinación de elementos. Ojo con los chalecos, es la prenda más difícil y puede reventarte un buen outfit. Mejor en vestidos o faldas y a ser posible de colores oscuros o muy claros; mis favoritos: los marfiles, una apuesta segura para el verano. Te sentarán mejor si estás bronceada. Frioleras, abstenerse.