Ayer nos llamó la policia y la guardia civil, para pedirnos que nos hiciesemos cargo de una perra que un vecino acababa de encontrar. Estaban indignados contandonos en el estado en el que la habían recogido y no querían que fuese a parar a la perrera. Cuando llegamos nos encontramos con una perra de agua, de dos años aproximadamente, y tremendamente asustada, tenía una pata trasera atada a la cabeza, algo que según nos han dicho suele ser un castigo que hacen los cabreros. La hemos llamado Vella y ya está con nosotros, pero como sabéis estamos teniendo muchas urgencias en estas últimas semanas, necesitamos adopción o acogida para Vella. contacto olgadiana@movistar.es