Entarimar una terraza o jardín siempre es una buena idea, sin necesidad de grandes obras puedes elaborar un espacio digno de cualquier revista de decoración, y es que las maderas y tarimas de exterior están pensadas para obtener el máximo en confort y decoración al mínimo coste.
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Ventajas de las tarimas de exterior
En realidad no hace falta decir mucho sobre la cuestión, realmente a todos se nos ocurre fácilmente que ventajas tiene la madera (sintética o natural), es un material duradero, de fácil instalación, con suelos cálidos en invierno y frescos en verano y permiten instalar espacios cómodos en casi cualquier parte. Son materiales pensados para no astillarse, antideslizantes, de fácil limpieza y con un mantenimiento bajo, dependiendo del material escogido, preparado para soportar rayos UVA y las inclemencias climáticas.
Una vez definido el proyecto, que dependerá mucho del uso que le queramos dar (porche, tarima para piscina, espacio con pérgola para merendar...) y el presupuesto, como ya hemos escrito anteriormente habrá que valorar el coste en función de 4 cosas: "el coste final dependerá del precio del material, el coste de instalación, la duración y el mantenimiento que requiera para mantenerse como el primer día. Esta ecuación nos puede acercar más al coste real, pues si un suelo de roble nos sale por 80€ metro cuadrado pero con un pulido quinquenal tiene un potencial para mantenerse en buen estado 200 años tendrá que considerarse más barato que un suelo vinílitico que cueste 15€ metro cuadrado y precise renovarse cada 20 años. Por ello, tanto si trabajamos con profesionales de los suelos de madera como si no, es conveniente hacer cálculos según nuestras posibilidades y requisitos."
Materiales para tarima de exterior
Partiendo de esta ecuación los materiales serán fáciles de escoger bien asesorados por profesionales de las maderas de exteriores que nos proporcione información del catálogo de materiales que nos ofrezcan. De todas maneras, a grandes rasgos tenemos dos grandes grupos de materiales: Natural o Sintético.
Las maderas para exterior naturales suelen extraerse de diferentes árboles, es muy común el pino, roble, cerezo... De todas maneras hace un buen tiempo que lo más demandado es la madera de Ipe, una madera muy densa de origen tropical con una gran resistencia y una variedad de colores que van del amarillo al marrón rojizo. La madera de Ipé ha triunfado por sus propias características de durabilidad, especialmente a xilófagos y hongos, y gran decoración que permite dejar cualquier espacio con un estilo inigualable y durabilidad comprobada a lo largo de los años con un mantenimiento mínimo.
Las tarimas sintéticas, o de composite, son asequibles y con una resistencia que le permite competir con materiales nobles como la madera. Aunque a largo plazo suele ser menos duradero, dependiendo con que madera se compare, el mantenimiento es nulo, el acabado siempre es bueno y tiene las mismas características antideslizantes y demás. Estas tarimas suelen fabricarse con virutas de madera y plásticos como el PVC, la composición de estas suele variar y según el precio obtendremos diferentes calidades.
Así a grandes rasgos esperamos haberte ayudado a diferenciar entre las diferentes tarimas para exterior y a que realices ese proyecto que tienes en mente, para tu jardín, terraza o lo que sea con un coste más bajo y un resultado excelente, una vez disponemos de suficiente información el asesoramiento especialista y un montaje profesional marcarán la diferencia para dejar el espacio en óptimas condiciones y que dure muchos años sin tener ue estar barnizando cada año ni otros engorrosos tratamientos.