La nuevas lluvias caídas durante la noche dejaron unas condiciones de pista casi idénticas a las experimentadas en la primera jornada, donde los compuestos para lluvia fueron protagonistas. Grosjean, que causó una de las cuatro fases bandera roja cuando su coche se quedó parado entre las curvas 9 y 10, marcó su mejor tiempo en las dos últimas horas de la sesión cuando la superficie se había secado considerablemente. Una nueva racha de lluvia le aseguró su puesto en el primer lugar.
Después de haber sufrido problemas por las condiciones del jueves, Grosjean fue al menos capaz de completar un buen numero de vueltas con los neumáticos medios y blandos durante su último día de test del año. Detrás de Button, quien lideró brevemente la sesión sobre mojado, Williams cambió sus planes para dar a Valtteri Bottas un día sobre seco en el fin de semana. Maldonado aceptó el cambio y se sentó en el monoplaza, antes de acabar de manera prematura cuando su coche se detuvo en la primera curva.
En Red Bull Vettel era el encargado de subirse al coche para recopilar más datos del RB9. A pesar de una breve salida de pista en la curva Seat, el alemán disfrutó de un día tranquilo y se dedicó a probar el nuevo concepto de DRS pasivo que el equipo ha creado para que el alerón trasero tenga un impulso extra de velocidad punta en línea recta. Los compatriotas Nico Hülkenberg y Adrian Sutil fueron los siguientes para Sauber y Force India, este último con un buen rendimiento y sin mostrar signos de fatiga durante su segunda jornada de test.
Daniel Ricciardo terminó séptimo con el Toro Rosso, aprovechando las pequeñas mejoras que su compañero de equipo Jean-Éric Vergne había comentado el jueves. En la parte posterior de la tabla de tiempos, Max Chilton con su Marussia terminó de nuevo por delante del Caterham, esta vez pilotado por el holandés Giedo van der Garde. Nico Rosberg, quien completó 120 vueltas y Fernando Alonso completaron el orden después de haber estado haciendo tandas largas con la pista seca por la tarde.