The lancet publica un estudio sobre la eficacia y seguridad the lancet publica un estudio sobre la eficacia y seguridad para tratar hepatitis c

Por Fat
Un estudio preliminar prueba la seguridad y eficacia de una nueva combinación de fármacos orales para la hepatitis C, que podría acabar con los problemas de los tratamientos que se aplican actualmente y revolucionar la terapéutica de esta patología.
El estudio Inform-1 (Oral combination therapy with a nucleoside polymerase inhibitor (RG7128) and danoprevir for chronic hepatitis C genotype 1 infection), publicado recientemente en la revista "The Lancet", concluye que los nuevos medicamentos son bien tolerados en general y no provocan más efectos secundarios que algún dolor de cabeza o náuseas, en pocos casos.
El equipo de investigadores, formado por especialistas de distintos centros de Australia y Nueva Zelanda, contó para el estudio con 88 pacientes que padecían hepatitis C crónica de genotipo 1 -la forma más común y difícil de tratar-. Algunos de estos pacientes nunca se habían medicado antes, y otros no habían respondido satisfactoriamente a la terapia con interferón. Los autores los asignaron a varios grupos: la mayoría recibió distintas dosis de los dos nuevos fármacos –RG7128 (un inhibidor de la polimerasa) y danoprevir (un inhibidor de la proteasa)- y el resto tomó placebo.
El resultado fue que aquéllos que nunca se habían tratado redujeron la presencia del virus en la sangre hasta niveles indetectables a los 13 días de iniciar el tratamiento, y aquellos que ya habían tomado antes alguno de los dos medicamentos, también mejoraron, aunque no con tanto éxito como los primeros. Por el contrario, quienes recibieron placebo empeoraron.
Los autores del estudio reconocen que se trata de una investigación muy preliminar, ya que se encuentra en Fase 1, pero apuntan que "abre una puerta al desarrollo de nuevos fármacos para la hepatitis y supone una esperanza para los pacientes".
Aunque se desconoce, por el momento, la eficacia de la nueva terapia a largo plazo, los resultados del estudio son muy positivos ya que contribuyen en el objetivo de disponer de tratamientos plenamente eficaces para la hepatitis C a corto plazo. En cualquier caso, y aunque la llegada de nuevos fármacos, más fáciles de tomar y más seguros es una necesidad, también conviene extender las pruebas de diagnóstico y concienciar a la población sobre este problema de salud.
La hepatitis C afecta a más de 170 millones de personas en el mundo, de las cuales sólo una mínima parte se encuentra en terapia -en Europa, sólo un 16% de los pacientes lo está-. Se estima que la quinta parte de las personas que sufren esta enfermedad desarrollará cirrosis en algún momento de su vida.