Es probable que cuentes con algún radiador en alguna de las habitaciones de tu casa. Y si no, es probable que en alguna ocasión hayas visto alguno. Para estos casos, hoy queremos proponerte una solución sencilla, pero que contribuye a economizar el espacio disponible en el dormitorio y que además ayuda a ‘camuflar‘ el radiador.
Si colocas la cama justo al lado del radiador, añadiendo simplemente un cristal o cualquier madera, puedes convertir el feo radiador en una práctica, improvisada y coqueta mesilla de noche.
El resultado, a la vista está… Con tan sólo colocar un cristal en la parte superior del radiador se ha logrado crear una base que permite convertirlo también en una mesilla de noche. El resto de la decoración depende de los gustos personales de cada uno: se puede colocar una pequeña lámpara de mesa, utilizarla sólo para colocar algún libro o un bonito jarrón con flores, etc.
Si tienes un radiador en algún dormitorio, prueba a decorarlo siguiendo esta idea, te sorprenderá el resultado.