A la vista del éxito que obtuvo, hoy os traigo una clasificación adicional de colegas con el objetivo de completar la radiografía de la fauna oficinística. Este post ha sido elaborado gracias a todos los comentarios que me habéis ido regalando a lo largo de la semana aquí, en mi perfil y en las comunidades de G+.
Muchas gracias por vuestros comentarios
A diferencia del viernes pasado, hoy hablaré de aquellos compis que son buena gente y, sin embargo, tienen algo especial que posiblemente que nos llegue a desquiciar en ciertos momentos del día.1. El culpable
Seguro que tienes una víctima a la que siempre echas la culpa de todo porque sabes que nunca podrá llevarte la contraria. ¿De quién estoy hablando? Venga piensa un poco ¿No caes en quien puede ser? Pues es ese que ya no está en la empresa por una larga baja por enfermedad o bien porque ya no forma parte de la plantilla.Explota un marrón que tenías oculto bajo la montaña de papeles, tu jefe te echa la bronca ¿y tú que respondes?:- Zutanito no me explicó nada al respecto, desconocía el asunto- Fulanito se estaba encargando de eso, no sabía que lo tenía que gestionar yo en su ausencia- Menganito me dijo que lo hiciera de esta forma
2. El Happy Flower
Hay compañeros que están siempre en una nube de felicidad. Se pasan el día haciendo bromas y contando chistes. Ni el compañero más jeta + listo +cabreado conseguirá borrarle la sonrisa de la cara. Les sueltas un marrón, sonríen y encima te dan las gracias. Increíble. Parece que se han fumado algo antes de entrar en la oficina.
3. Los Solidarios
En esta línea, hay gente que siempre está dispuesta a ayudar. Son esos a los que recurres cuando no tienes ni idea de cómo gestionar algo y tu jefe te está pidiendo resultados con la yugular hinchada. Son los compañeros ideales que te sacan del apuro, sin estarte restregando después el favor durante los meses siguientes. No se chivan al jefe de que no tenías ni idea. Pasan de medallas. Lo hacen por solidaridad obrera.
Reconócelo, alguna vez te has aprovechado de ellos. Por eso, te sugiero que alguna vez les ayudes tu a ellos cuando lo necesiten. Son solidarios pero no tontos.
4. El tonto
Y hablando de tontos, hay gente a la que le falta un hervor. Son muy cortos, tanto que parece que tienen el cerebro hueco. Unas veces te dan lástima y otras les matarías ¿a que sí?
www.solocachondeo.com
En mis tiempos de contable tuve una compañera que registraba las facturas unas veces con IVA y otras sin IVA. Ya os imaginareis que las cuentas no cuadraban ni para atrás. Gracias a ella, los días de cierre llegábamos a trabajar más de 12 horas al día arreglando sus desaguisados. Nadie en el departamento era Happy Flower en aquellos momentos. Millones de veces se le dio formación en ese asunto y millones de veces ella tomó nota de las explicaciones en su cuaderno.
Al mes siguiente, lo volvía a hacer todo mal. En ocasiones era desesperante porque notabas que no estaba entendiendo nada de lo que le decías. Creo que la empresa la tenía contratada para cobrar alguna subvención por tener discapacitados mentales en la plantilla o algo así.
5. Barbie y Ken
Barbie y Ken saben que deslumbran a los demás en la oficina porque nacieron guapos. Aunque eso también es resultado de otros sacrificios que tienen que hacer para mantenerse así. A la hora de la comida almuerzan un sándwich orgánico ecológico de 300 calorías y acto seguido se van al gym a quemarlas. Ellos esculpirán su cuerpo con todos los aparatos y pesas. Ellas irán a GAP y aerobic para tener cero tripa y el culo prieto.
No hay que olvidar que están a la última en moda. Su tema de conversación será básicamente ropa, maquillaje y otras tendencias super cool.La combinación físico + dieta + ejercicio les triunfar en las cenas de Navidad y fiestas de empleados. Serán los más ligones del evento. Y los frikis y otras especies de la fauna de la oficina les tendrán una profunda envidia.
6. El JuerguistaHay compañeros que llegan a trabajar directamente después de la fiesta nocturna en donde estuvieron las últimas horas. Lo sabrás porque llevan la misma ropa que ayer, huelen a alcohol, sudor y quizás a tabaco y, como la cara es el reflejo del alma, se notará que no han pegado ojo en toda la noche.
Si os dais una vuelta a eso de las 7AM por Azca, el distrito financiero de Madrid, veréis muchos ejecutivos que entran a trabajar en sus respectivos rascacielos haciendo eses porque aún siguen con la moña encima.
¿Tienes una sonrisilla ahora en la cara y estás asintiendo? ¡¡Te pillé!! Eres un jueguista y has empalmado fiesta con trabajo.
7. El Friki
Es ese que se viste raro, se comporta raro y habla de temas raros. Cuando hace un chiste o una broma, nadie entenderá muy bien la gracia. Generalmente decoran su espacio de trabajo con trofeos ganados en concursos del cole o de la comunidad de vecinos o bien con medallas de alguna competición deportiva en alguna modalidad individual tipo atletismo. Podrán tener figuritas tipo Lego o miniaturas de La Guerra de las Galaxias. Seguramente tengan algún gadget tecnológico que no sirve de nada pero que ellos piensan que es muy molón.
8. Informáticos
Amigos de IT, reconoced que sois poco frikis vosotros también. En vuestro espacio de trabajo hay cajas, cables y artilugios raros. Vosotros sois los únicos que no vais con traje a trabajar, ni siquiera de Casual Friday los viernes. Siempre vais con camisetas con letreros llamativos o camisas de franela de leñador, pantalones vaqueros desgastados, zapatillas de deporte …
¿No la habéis visto? Pues algunos de sus personajes son super populares en Inglaterra.
(No os lo toméis a mal, estoy de broma)
9. Las Mamás
Son como una pequeña secta en la oficina. Van en grupitos en los que no puedes integrarte sino has dado a luz. Aunque si fue por cesárea, amiga, te llevas muchos puntos para ser líder del grupo.Ellas solo hablan del embarazo, el parto, la lactancia, los pañales, la elección del pediatra, del colegio, la preparación de las fiestas de cumpleaños … Claro, los niños no vienen con un manual de instrucciones y tienen que compartir experiencias. Excepcionalmente aceptan en el grupo a padres recién divorciados con niños pequeños.
10. La Pastelera
Tengo una compañera que todos los días nos trae bizcochos, muffins, cookies, cup cakes, maccarons, etc para desayunar. Su mesa parece una pastelería con un gran surtido de bollos. Media empresa pasa por allí cada mañana. Se le debe ir medio sueldo en comprar los ingredientes y cocinarlos. Trabajar, lo que se dice, trabajar … no, ella se pasa el día metida en internet buscando recetas para innovar y hacer repostería creativa. ¡Eh! que conste que no le estoy reprochando nada ¿cómo iba a hacerlo? me da de desayunar gratis todos los días ;)
11. Los futboleros
Esta es otra secta pero en versión masculina. ¿Qué os voy a decir de ellos? Llegas los lunes por la mañana inconsciente a la oficina y ya están ahí los futboleros discutiendo acaloradamente sobre el Barça, el Madrid, el Atleti, etc o sobre cualquier jugada polémica, el arbitraje o los jugadores. No sé por qué siempre hablan a gritos y te intentan convencer de que su equipo es el mejor del mundo:
- Erika, ¿a que Messi jugó de miedo este fin de semana?
- No lo sé, no me gusta el gusta el fútbol. Sólo me tragaba los partidos cuando estaba David Beckham pero como ya se fue …- ¿Del Real Madrid? no jodas, Erika- Nooooo, he dicho Beckham, yo no he nombrado ningún equipo
-Pero Erika que Beckham no juega tan bien
- ¿Y a mi qué? era un espectáculo verle corriendo por el campo sin camiseta
12. Los ladrones de material
Hay gente que siempre te manga el boli, los post-it o incluso el bloc de notas.
Mi mesa está cerca de la sala de juntas. Si bien en las reuniones con clientes importantes pongo todo el despliegue de medios en la sala (bolis, cuadernos, caramelos) cuando es una reunión interna no pongo absolutamente nada. Vamos, no le doy ni al ON del proyector.Cuando mis compañeros llegan a la sala y ven el panorama, por no ir hasta su mesa, se acercan a la mía y me dejan el bote de los bolis esquilmado. Una vez me mangaron hasta mi cuaderno de trabajo con mis anotaciones y todo. ¡Qué fuerte!
Me fastidia que me hagan esto. No porque el armario con el material de papelería esté en la otra punta de la oficina. De hecho esto es genial porque es la excusa perfecta para levantarme y perder de vista a mi jefe un rato. Me fastidia porque ¿vosotros no tenéis un boli favorito con el que os mola escribir? Pues yo también y cuando me lo mangan, hasta que encuentro otro nuevo boli favorito pasan varios días y, claro, trabajar en esas condiciones no mola nada.
13. El que Sisa Dinerito
Hay gente que se presta voluntaria a recolectar dinero para comprar regalos de cumpleaños, aniversarios, otros eventos.
En mi trabajo ponemos un fondo común entre todos para comprar refrescos, leche y café para la cocina comunitaria. La administradora es la pastelera. Casualmente nunca queda un remanente de dinero. Estoy convencida de que sisa las vueltas y con ese dinero compra los ingredientes para los bollos que trae todos los días a la oficina.**************************
Con estos compañeros creo que ya tenemos la fauna al completo ¿o no? bueno, ya me decís abajo en los comentarios si faltó alguno.