Desde que empezamos con el blog tenía muchas ganas de preparar un tiramisú de limón. No porque el tiramisú sea un postre que me chifla, que lo es, sino porque las notas de una canción de Joaquín Sabina, llamada así, eran las que daban entrada a nuestros podcast, que durante más de dos años grabábamos Nieves y yo semana tras semana.
En "La cajita" tenemos ya otro tiramisú más clásico, pero el de limón tenía que estar. Lo he preparado sin seguir ninguna receta, simplemente aromatizando con zumo de limón en lugar de café, y poniendo una crema de limón entre dos capas de bizcochos bañados en un almíbar de limón. El resultado ha sido un postre con un sabor refrescante. ¿Os animáis a probarlo?. Si es así seguid leyendo la receta ;)
Ingredientes:
- Bizcochos de soletilla
- Almíbar de limón:
150 gr. azúcar zumo de medio limón
ralladura de medio limón
- Crema de limón:
100 ml. De zumo de limón (dos limones grandes) Ralladura de 1 limón 40 gr. de Maizena 350 ml. de agua mineral 3 yemas de huevo 100 gr. de azúcar
- Crema de mascarpone aromatizada con limón
200 ml. de nata 35% materia grasa 160 gr. de azúcar zumo de 1 limón y medio Ralladura de limón
Elaboración:
Vamos a preparar las distintas partes del postre, para montar todo al final. Yo utilizo bizcochos de soletilla, pero si preferís hacer una plancha de bizcocho genovés, esto sería lo primero que habría que hacer. A continuación preparamos un almibar de limón poniendo al fuego todos los ingredientes: agua, azúcar, ralladura y zumo de limón y removiendo. Cuando rompa a hervir apagamos el fuego y vertemos sobre una fuente pequeña, ya que allí mismo vamos a ir mojando los bizcochos y más recogidito el almíbar es mejor. Dejamos enfriar mientras hacemos la crema de limón.
La crema de limón podemos hacerla con o sin Thermomix. Con esta última, ponemos el azúcar y la ralladura de limón, y pulverizamos durante 30’’ a velocidad creciente 6-10.
Añadimos el resto de ingredientes y programamos 6’ 100º velocidad 4.
Sacamos y reservamos en un recipiente cubierto para que no se reseque, y lo dejamos templar.
De forma tradicional, desleímos la Maizena en un poco de agua. El resto de agua la ponemos en una cacerola junto con la ralladura de limón y lo llevamos a ebullición. Cuando rompa a hervir, separamos del fuego y añadimos la Maizena desleída y vamos removiendo hasta que espese y se integre toda, entonces volvemos a llevar al fuego hasta que coja consistencia. Volvemos a retirar del fuego y añadimos de una en una las yemas, removiendo rápida y continuamente para evitar que se cuajen. A continuación añadimos el zumo de limón y por último incorporamos el azúcar, todo ello sin dejar de mover.
CREMA DE MASCARPONE AL AROMA DE LIMÓN:
Montamos la nata con la mitad del azúcar. Lo hacemos con el batidor de varillas. Tenemos que tenerla muy fría. Yo suelo meter la nata diez minutos antes en el congelador. Reservamos.
En un bol grande mezclamos el queso mascarpone con el resto del azúcar, y cuando lo tengamos bien integrado añadimos el zumo y la ralladura de limón.
Mezclamos bien e incorporamos la nata. Esto lo hacemos con mucho cuidado y con movimientos envolventes.
MONTAJE:
Elegimos el recipiente en el que vamos a servir el tiramisú, ya sea de forma individual o en una fuente honda. Yo lo tenía que transportar, y me pareció adecuado llevarlo en un molde desmoldable rectangular. Si vamos a desmoldar, cubrimos el fondo del molde con papel de hornear.
Ahora vamos mojando los bizcochos en el almíbar, y cubriendo con ellos la base de nuestro molde. Tenemos la primera capa.
La siguiente capa es la crema de limón. A mí se me fue la mano con la Maizena y me espesó un pelín más, pero con las cantidades que pongo queda perfecta.
Vamos a una tercera capa, esta vez de nuevo son los bizcochos empapados en almíbar.
Por último cubrimos completamente con la crema de mascarpone aromatizado con limón, y decoramos con unas virutitas de ralladura de limón.
Dejamos enfriar en el frigorífico al menos seis horas.
Un postre con un sabor muy refrescante. ¡Os encantará!
Bon appétit