Esta sencilla idea está muy presente tanto en mi trabajo como en mi vida cotidiana. La pasada semana me encontré con una carpeta de archivos digitales que contenía estos dos dibujos que hablan de lo mismo, pero con un lenguajes diferentes. Me parece interesante mostrarlos juntos y comentar que son de la misma época. El más esquemático es de finales del 99 y el de los rostros de Abril del 2000.