Llevaba días pensando en la idea de hacer las torrijas al horno porque al no poder mi marido tomar grasas no quería privarle de unas ricas torrijas, así que pensé que tal vez quedasen bien, y probé. Y el resultado fue muy, pero que muy bueno. Todas las personas que por un motivo u otro no puedan o no quieran tomar fritos no tienen ya porqué privarse de comerse una riquísima torrija.
El modo de proceder es exactamente el mismo que para las torrijas convencionales, la única diferencia es que no se fríen, así que no necesitaremos aceite. No pongo la receta entera puesto que al estar en el blog, si queréis verla aquí está el enlace.
PREPARACIÓN
Preparamos las torrijas del modo tradicional hasta el punto en el que están mojadas en leche y reposando en la fuente. He hecho dos fuentes, unas tradicionales y siete al horno a modo de prueba para ver como quedaban. Moja bien las rebanadas de pan en la leche para que queden muy jugosas por dentro porque al ir al horno puede que se sequen si no están bien mojadas. Precalentaremos el horno a 190º con calor arriba y abajo.
Cogemos la torrija con la mano y con cuidado para que no se rompan y las ponemos en la fuente del huevo batido, y a continuación también con las manos, la cogemos y la colocamos en la bandeja del horno donde habremos puesto un papel de hornear. Y lo mismo con todas.
cuando las tengamos en la bandeja espolvoreamos azúcar con canela por encima. cuando el horno haya alcanzado la temperatura, metemos la bandeja en la rendija del medio. Mientras he frito la tanda de torrijas tradicionales y en el huevo batido que ha sobrado he puesto una cucharada tamaño postre de azúcar mezclada con canela y lo he movido bien. Cuando hayan pasado quince minutos sacamos la bandeja y volvemos a pintar con una brocha bien mojada en el huevo con azúcar y canela por encima de las torrijas. Las tendremos otros diez minutos más o menos. Yo las he tenido en total veinticinco minutos y sin darles la vuelta. Cuando estén doraditas las sacamos del horno y tendrán este aspecto
Con una espátula las vamos sacando a una fuente y ponemos un chorrito de leche de la cocción inicial donde hemos mojado las rebanadas de pan.
Espero que os guste y os sirva.
Y aquí os enseño mi fuentecita de las torrijas a modo tradicional.
Para todos los gustos.