Toyo Ito o la arquitectura conceptual del viento y de la naturaleza

Por Antonio Serra Junior @AntonioSerraJr

Toyo Ito es uno de los arquitectos más importantes vivos, hasta el punto de haber sido galardonado en el año 2.013 con el Premio de mayor relevancia que otorga el mundo de la arquitectura: el PremioPritzker

El arquitecto japonés ha sido uno de los más innovadores en arquitectura. Ha proyectado edificios con los elementos más sutiles de la naturaleza, inspirándose en el viento, la transparencia del agua o los destellos luminosos. Sus obras inspiran ligereza, amor y respeto por el paisaje, así como poesía y espiritualidad.

En su arquitectura conceptual desmaterializa el edificio para transformar su espacio en luz a la par que difumina los límites entre exterior e interior, siguiendo la tradición ancestral nipona de alternar luz y penumbra, las transparencias, lo translúcido. Funde magistralmente las tradiciones arquitectónicas japonesas con la alta tecnología e, incluso, ha buscado en la arquitectura un correlato del universo digital, pues es un enamorado tanto de la naturaleza como de las más alta tecnología.

Y logra todo a pesar del hormigón, del aluminio y del acero que conforman el necesario esqueleto estructural, que adapta a la perfección a la topografía del terreno. Ha sentado las bases de fundir la tecnología con la naturaleza siendo un referente para los actuales arquitectos innovadores.

Los cristales, las transparencias, sus construcciones recuerdan formas orgánicas, como huesos o árboles. Enormes edificios que parecen esculturas urbanas gigantes perfectamente integradas en su entorno. Porque quiso romper con la arquitectura tradicional, que consideraba de horrible estética, y crear espacios arquitectónicos que nos recuerden la naturaleza, nuestra conexión con la madre tierra incluso en las ciudades. Edificios optimistas y amigables para vivir o para trabajar.

Toyo Ito proyectó el edificio de Sendai, que aguantó sin ningún problema el tsunami de 2.011: la construcción tiene una estructura arborescente, con los pilares huecos, que recuerdan los bosques de bambú construidos con tubos de acero soldados entre sí como si del tramado de una cesta se tratara, otorgando resistencia y fluidez al edificio.

Edificio Sendai. Foto Wikimedia org

Para él no hay mejor arquitectura que la de un árbol; los árboles han sido inspiración para diseñar el edificio de Sendai y han estado presentes en muchas de sus creaciones.

Esto es evidente en Las Torres Porta Fira de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), donde en el edificio que alberga el Hotel Porta Fira las formas orgánicas recuerdan un tronco de árbol en colores rojo y tierra, que va cambiando y girando a medida que nos movemos para observarlo. 

Crédito foto Fermín Vázquez arquitectos

Si pasáis por Barcelona, no olvidéis ir a verlo porque se trata de una increíble joya arquitectónica!

Amor por la naturaleza es lo que reflejan sus edificios. Como el construido en El Paseo de Gràcia (Barcelona): se trata de la fachada y los patios interiores de los apartamentos de lujo Suites Avenue enfrente de La Pedrera, inspirado en el entramado de las ramas de los árboles y realizada con franjas de acero nacarado, ondulan e inspiran un gran dinamismo, un gran flujo energético, como si paseáramos por un bosque.

Crédito foto Wikimedia org


El artista arquitecto nipón, pionero de la expresión orgánica en arquitectura, siempre ha soñado con una arquitectura que no tuviera formas y pareciera tan ligera como el viento. Y, francamente, logró sus sueños!