El tránsito intestinal normal es fundamental para evitar una serie de problemas digestivos y extra digestivos. Entre ellos la aparición de reflujos, tanto gastroesofágicos como duodenogástricos. Por tanto todas las medidas que se tomen para evitar su alteración son recomendables.
A diario se publican evidencias de la participación de los microorganismos residentes en el tubo digestivo inferior, intestino grueso, en diversas funciones fisiológicas. Esta población conocida como microbiota.
El tránsito intestinal enlentecido o detenido como en los cuadros de constipación ha sido ligado a problemas de desbalance de la microbiota y resuelto con transplantes de microbiota fecal. Al parecer una población microbiana alterada produce metabolitos que promueven la constipación, por lo que su normalización podría ser una terapia recomendable.
Esta aseveración la han hcho los autores de un trabajo realizado en China. https://www.nature.com/articles/s41598-017-00612-y