Las cifras de presión sanguínea en las arterias varían con la edad. En edades más avanzadas, por norma general la tensión aumenta. Los signos que nos muestran una tensión elevada o hipertensión suelen ser:
- Vértigo
- Insomnio
- Trastornos visuales
- Palpitaciones
- Hormigueo en las manos
- Hemorragias nasales
Es aconsejable consultar con el médico ante cualquiera de éstos síntomas, ya que podrá valorar adecuadamente la diferencia entre tensión máxima y mínima, cuestión de gran importancia para el correcto diagnóstico y posterior tratamiento.
Cuidados generales para la hipertensión
Por regla general, los enemigos tradicionales de la hipertensión son las grasas y el tabaco, pero además es aconsejable seguir unas pautas diarias:
- Cuidar la función intestinal evitando el estreñimiento
- Sobriedad alimenticia sin exagerar la ingestión de alcohol
- Adecuado descanso
Tratamiento con fitoterapia de la hipertensión
La fitoterapia es una ciencia que utiliza las plantas para la prevención, el tratamiento o la cura de ciertas afecciones y enfermedades, todo ello sin menosprecio de la medicina alopática (convencional) con la que puede complementarse en la mayoría de los casos. Por tanto tiene una finalidad terapéutica y su origen está en la propia naturaleza.
Plantas especialmente indicadas para la hipertensión:
- Espino blanco
- Ajo
- Infusión de espino blanco: Esta agradable infusión se realiza con una cucharada sopera de flores secas en una taza de agua hirviendo para tomar dos o tres veces al día durante tres semanas por mes.
- Maceración de ajo: Consistente en una parte de ajo triturado por 5 partes de alcohol, para tomar 20 ó 30 gotas de este preparado durante las principales comidas. Para este tratamiento, por prudencia, se debe consultar al médico.