Al final, me dejas solo desangrándome, sin primaveras en mis manos para dar, la vida se me va con tu querer, al final me cubres todo de angustiosa soledad, porque el presagio que jamás regresaras y yo sin tu mirar que voy a hacer. Emmanuel
La ruptura de una relación amorosa puede ser devastadora para muchas personas, que hoy por hoy se preguntan, ¿hay alguna forma de superar esto? Son personas, que han probado con lo que dice la sociedad, se han deshecho de los recuerdos materiales, y probado con diferentes alternativas sin ningún éxito.
En la actualidad podemos ver en las redes sociales diferentes frases sobre todo tipo de temas y situaciones, y el tema de la rupturas amorosas no son la excepción. En muchas de estas frases se dan sugerencias de cómo superar una ruptura, frases que vienen de gente especialista y no especialista en el tema.
Muchas de estas frases pueden encajar en lo que esté viviendo un individuo en un determinado momento, sin embargo si tomamos en cuenta que cada persona pasa por emociones similares que están siendo ocasionadas por pensamientos, presunciones y creencias diferentes, nos podremos dar cuenta de que esas frases que parecen recetas decocina no siempre ayudan y no se aplican a todos los casos. La ayuda que requiere cada ser humano depende de cada ser humano, sus pensamientos, presunciones, creencias, y de lo que resultó dañado en específico en la ruptura.
Una persona ajena a la situación puede decir: “ya ha pasado mucho tiempo de la ruptura, ya deberías haberlo superado”, el superar esta o cualquier situación no es cuestión de tiempo solamente, es cuestión de lo que se ha perdido, una persona externa puede también decir “ es solo una pareja, hay millones de personas en el mundo” pero que significa para esa persona la perdida de su pareja, tal vez sea la pérdida de seguridad, de aprecio, de compañía, o cualquier otro significado, que si se traduce de esta manera queda claro, porque algunas personas sufren más que otras con la ruptura de una relación.
El procedimiento psicológico en estos casos es diferente y depende de cada corriente, en este caso, la terapia cognitivo conductual (tcc), explora los pensamientos, presunciones y creencias que mantienen el malestar tras una ruptura amorosa, y no con esto pretende minimizar el papel de las emociones, ya que por ejemplo cuando acaba de ocurrir la ruptura o lleva poco tiempo de ocurrida, las emociones pueden llegar a ser tan intensas que no permiten ningún tipo de razonamiento.
Por lo cual la tcc también permite una descarga emocional que al final de cuentas, ayuda al entendimiento de cómo estas se generaron mediante los pensamientos del propio individuo. Este entendimiento es crucial, porque permite entender que le ocasiona a esa persona el malestar del cual no ha podido salir. Así es que si estás pasando por un momento doloroso tras la ruptura de tu relación, no te enganches con frases hechas o suposiciones de otras personas, es más recomendable buscar ayuda de un especialista, procurando sentir confianza y comprensión del mismo, ya que de lo contrario el proceso puede no llegar a ser exitoso. Recuerda que si alguien invalida tus emociones, no te está comprendiendo de verdad.
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