Uno de los principales problemas en los tratamientos de reproducción asistida es el fallo implantacional que puede deberse a distinta causas como enfermedades del útero, causas genéticas, hormonales, metabólicas… De esta forma, según la clínica de reproducción asistida Ginefiv, un elevado número de casos de fallos de implantación embrionaria podría deberse a factores inmunológicos.
Las células Natural Killer (NK) son responsables de la defensa inmunológica, capaces de destruir lo que identifique como cuerpo extraño: células tumorales o infectadas, fundamentalmente. Puesto que el embrión posee células distintas a la madre, podrían reconocerlo como extraño y destruirlo. Son varios los tratamientos para la regulación de estas células como los corticoides, los bloqueadores TNF, la gammaglobulina intravenosa o la heparina.
"En nuestro centro, a las pacientes sometidas a ciclos de Fecundación in vitro y que presentan un fracaso de implantación (fracaso de gestación tras tres transferencias con embriones de buena calidad), además del estudio básico de fallo implantacional, recomendado por las sociedades científicas, se les propone la posibilidad de hacer un estudio inmunológico de implantación; estos estudios se encuentran en fase experimental, pero sus datos parecen prometedores”, señala la Dra. Isabel Santillán, ginecóloga de Ginefiv.
Dicho estudio está basado en la detección de las células Natural Killer (NK) en sangre y endometrio. Si estas células están aumentadas se podría plantear una inmunoterapia a base de heparina, corticoides, inmunoglobulina, intralipids o incluso anti-TNF dependiendo de las características de la paciente y la patología asociada.
“Estos tratamientos han de ser consensuados, en función de la patología de la paciente, con el especialista en inmunología ó reumatología”, afirma la Dra. Santillán.
“A la heparina se le han atribuido efectos antiinflamatorios y su uso es cada vez más frecuente en patologías relacionadas con el fracaso de implantación. En pacientes con un proceso autoinmune concomitante, recomendamos anti-TNF consensuándolo con el reumatólogo de la paciente. En algunos casos seleccionados cabría la posibilidad de administrar gammaglobulinas intravenosas, siempre bajo la indicación del inmunólogo y sabiendo, que en este momento dichos tratamientos están todavía en fase muy inicial", concluye la Dra. Isabel Santillán.