-El exoesqueleto es ligero, resistente y autónomo
El primer exoesqueleto presentado por Raytheon Sarcos fue Sarcos XOS, y ya mostraba unas capacidades increíbles. Permitía a quien lo vistiera levantar un peso de cien kilos como si se tratara de uno. Además, era flexible, y se podía correr o saltar con gran facilidad. El nuevo XOS 2 tiene todo eso, y va aún más allá. Accionado por un sistema hidráulico de alta tensión, es más resistente y gasta la mitad de energía, pero su principal innovación es que tiene más capacidad de autonomía. El objetivo final es eliminar el cordón de alimentación.
-El trabajo de tres hombres
Pero, ¿cuál es el objetivo de este traje sacado de la ciencia ficción? Por un lado, y tratándose de un proyecto financiado por DARPA, tendrá con toda seguridad usos militares, pero también puede ser muy útil en el ámbito logístico. Soldados u operarios podrían levantar piezas sin esfuerzo como si fueran máquinas o rearmar las pesadas piezas de un avión de combate con la misma rapidez y diligencia con la que los técnicos de la Fórmula 1 cambian una rueda. Levantar objetos pesados de forma repetitiva pueden conducir a lesiones, y el XOS «reduce la tensión y el esfuerzo». Según sus creadores, un operador con el exoesqueleto, puede hacer el trabajo de dos o tres personas.
Los responsables del proyecto creen que su ingenio puede estar listo en unos cinco años. Curiosamente, en el vídeo de presentación del XOS 2 aparece Clark Gregg, el actor que interpreta al agente Phil Coulson en las dos entregas de Iron Man. Y es que en ingenios como este ficción y realidad no son fáciles de distinguir.
**Publicado en "ABC"