Ha sido un año difícil, que no acabamos los mismos que lo empezamos. Se ha ido gente que alegraba la vida a esta familia tan necesitada de risas. Alguien tan feliz que en su velatorio sólo se oían cosas divertidas de su vida. Se fue de una forma tan espontánea como vivió. Olé, olé y olé madrina guapa!!!
Un año de aprendizaje, de encontrar un nuevo camino laboral, y de empezar a dar brazadas para conseguir salir adelante de la tristeza que me ha rodeado estos años.
Otra Navidad también sin ti, papá, pero con recuerdos de nuestros bailes en el sótano de casa en Noche Vieja, del Belén que montábamos con mis hermanos y de los árboles iluminados en el jardín. ¡¡Qué triste no haber sabido valorar todo eso cuándo era pequeña!! Seguiremos dejando preparado tu sitio en la mesa de celebración, porque estás con nosotros.
Y teniendo bien presentes a mis abuelos (incluso a los que no conocí, porque me han enseñado a quererlos de igual forma), y a sus historias y poemas navideños.
Una Navidad en la que mi peque-peque será por primera consciente de qué es esto de la Navidad, y descubrirá la magia de los Reyes Magos, y sí, también de Papa Noel, por que recorremos España de Norte a Sur en Fiestas y hay que celebrarlo todo, y aunque ese señor no es Santo -nunca mejor dicho- de mi devoción, he sucumbido a su reclamo. Y en la que mi peque-grande, ahora, que sabe lo que es, la disfrutará como nadie.
Otro año que se va y que ha traído nuevos amigos, reencuentros, desgraciadas y alegrías, proyectos, ilusiones, viajes, grupos de Facebook que me inspiran y de los que aprendo: Frikymama's Blogger Club, Emprendedores en Prácticas o Amigas del Crochet y mis blogs, que me han dado la oportunidad de ensayar, de aprender, de conocer, de disfrutar y de expresarme.
Un año como cualquier otro.
Feliz Año!!!