Que la vida puede cambiar en un instante es algo que cualquier chico de 17 años sabe. Pero ¿cómo actuar cuando eres el protagonista, a la fuerza, de una nueva vida con tintes trágicos? En este punto se encuentra Genís, que intenta adaptarse a un hogar sin padre, a cuatro asignaturas suspensas, a un trabajo mal pagado en una editorial… Lo cierto es que con este panorama el mes de julio, y la eternidad si nadie lo remedia, promete ser un infierno. Pero todo cambia, otra vez, el día que Genís conoce a Alicia, una chica enigmática y distinta al resto que le enseñará a ver la vida con otros ojos.
Voy a empezar por el final: debes leer Un haiku para Alicia y te voy a dar todas las razones que quepan en esta reseña para que el libro acabe en tus manos. La historia en sí es la primera razón. Cualquiera puede sufrir el dolor de un hogar roto o esa rabia muda que no te deja respirar cuando sabes que nadie puede contestar a tus preguntas. Seguro que alguna vez un recuerdo impertinente se ha sentado contigo en el bus de vuelta a casa y a duras penas has podido contener las lágrimas. Piénsalo: ¿a quién le importa lo que dice el profesor de Historia sobre la Segunda Guerra Mundial si, hoy por hoy, el que está en guerra con el mundo eres tú? Esta es la historia de Genís, la historia normal de un chico normal, y Miralles sabe cómo contarla para convertirla en genial. Y aquí tienes la segunda razón para que la leas: Francesc Miralles consigue que creamos en Alicia, un punto de luz en medio de tanto gris. Alguien que llega a tu vida para rescatarte, así es ella. La tercera razón es la ausencia de artificios narrativos o descripciones innecesarias. Genís las odia y solo las emplea para lo verdaderamente importante: describir a Alicia, por ejemplo. Te encontrarás con una estructura muy sencilla: cuatro partes y epílogo, con capítulos cortos que no se quedan cortos. Dime si no cómo en pocas páginas Miralles es capaz de explicar el periplo de los escritores en busca de una editorial que les dé una oportunidad y cómo la mayoría de manuscritos acaba en un sótano polvoriento sin que nadie haya leído más que el título. Y eso mismo, el título, es la cuarta razón que daré para que leas esta historia, porque ¿me vas a negar que no sientes un poquito de curiosidad por saber qué es un haiku? Genial, porque ese es el mejor comienzo.
Aunque no es novedad en el sentido estricto -la primera edición es de 2002, aunque entonces solo se publicó en lengua catalana-, Un haiku para Alicia es un libro nuevo para la mayoría del público. Fantástica idea de Plataforma Neo, porque esta es una gran historia que no debes perderte si andas perdido. Y prueba a hacer un haiku, vale la pena. Por cierto, mi quinta y última razón para que leas el libro es la teoría del universo de Alicia. Espectacular.