El fármaco supondría un avance trascendente en este campo", asegura GallegoEl fármaco, según explica Tigyi, propicia la reparación de ADN dañado por la radiación ionizante; detiene la progresión de la muerte celular, dando así da margen a la célula para reparar su ADN y curarse a sí misma; y promueve el crecimiento celular y, en consecuencia, la regeneración de tejidos. El compuesto desarrollado mejoró la supervivencia de células sanguíneas e intestinales de ratones y seres humanos. Probado en ratones, demostró su capacidad para mantener vivos al 93% de los animales tratados con el fármaco incluso iniciando el tratamiento tres días después de su exposición a la radiación. Solo sobrevivió el 20% de los ratones que no fueron tratados con el fármaco, según el estudio que se da a conocer hoy."Desde luego es algo muy nuevo, no teníamos medicamentos capaces de mitigar los efectos de la radiación ionizante", celebra Eduardo Gallego, presidente de la Sociedad Española de Protección Radiológica. "El estudio muestra unos ensayos bastante convincentes que, aunque aún necesitan desarrollo hasta llegar a las personas, supondría un avance trascendente en este campo", asegura. Gallego señala a los pacientes en tratamiento de radioterapia como los únicos casos en los que se podría probar el fármaco con humanos.Aunque este remedio tendría una gran importancia para sustos como el de Fukushima —uno de los mayores productores de tabletas de yodo vendió más pastillas en los tres días después de la catástrofe japonesa que en los tres años previos—, sus impulsores trabajan con la vista puesta precisamente en los enfermos que deben tratarse un cáncer con radiación.Los investigadores quieren desarrollar fármacos contra los efectos secundarios de pacientes que reciben radioterapia"Esperamos ser capaces de desarrollar fármacos que sirvan para atenuar los efectos secundarios de pacientes que reciben radioterapia. Los que padecen cáncer de próstata a menudo desarrollan efectos secundarios no deseados en su recto y el tratamiento contra el cáncer de mama suele desarrollar lesiones en la piel", adelanta Tigyi, quien cree que un tratamiento análogo serviría incluso para el alivio de los efectos secundarios de la quimioterapia. El medicamento se está desarrollando con la empresa biotecnológica RxBio, que consiguió junto a la Universidad de Tennessee un contrato de 15 millones de dólares del Gobierno de EE UU para su puesta en marcha poco después de que los reactores de Fukushima se derritieran.Este fármaco también servirá para proteger a los astronautas en sus viajes espaciales, ya que la radiación de rayos cósmicos es uno de los principales retos que se le plantearían, por ejemplo, a unos futuribles colonos de Marte. Los autores también señalan otras posibilidades menos simpáticas, como ataques terroristas con armas atómicas, para las que también sería provechoso contar con un antídoto para los afectados.
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