Así que, antes que nada, encolamos las piezas sueltas, reconstruimos con masilla las zonas que habían perdido su forma original, y también igualamos algunas partes de la madera muy deterioradas.
Después de lijar e imprimar en gris, dimos varias manos del color elegido por Alicia y este es el resultado final
En su destino le está esperando un azulejo en tonos añil y motivos naturales de aves y vegetación. Irá situado en la parte central, encima de la celosía.
Un perchero muy especial, retro y con mucho encanto... ¿A que sí?