Un peso más saludable podría significar menos migrañas

Por Mundotlp @MundoTLP
Un estudio encontró un aumento en el riesgo tanto de las personas obesas como de las que tienen poco peso.

Quizá su peso influya en el riesgo migrañas, encuentra una nueva revisión."Las personas con migraña y [sus] médicos deben ser conscientes de que el exceso de peso y la pérdida excesiva de peso no son buenos para [los que sufren de migrañas], y que mantener un peso saludable puede reducir el riesgo de migrañas", dijo la autora para correspondencia del estudio, la Dra. B. Lee Peterlin.Peterlin es directora de investigación sobre el dolor de cabeza en la Facultad de Medicina de la Universidad de Johns Hopkins, en Baltimore."Se ameritan estilos de vida saludables en términos de la gestión del peso, la dieta y el ejercicio", añadió.Las migrañas afectan a más o menos un 12 por ciento de los adultos de EE. UU., según la información de respaldo de la Johns Hopkins. Estos dolores de cabeza debilitantes con frecuencia se dan junto con palpitaciones, náuseas y sensibilidad a la luz y al sonido.El equipo de Peterlin evaluó 12 estudios publicados previamente sobre casi 300,000 personas, un proceso conocido como metaanálisis.Los investigadores encontraron que las personas obesas tenían un 27 por ciento más de probabilidades de sufrir de migrañas que las personas con un peso normal.Y las que no pesaban lo suficiente tenían un 13 por ciento más de probabilidades de sufrir de migrañas.Los investigadores utilizaron las definiciones estándares tanto de obesidad, que es un índice de masa corporal (IMC) de a partir de 30, como de peso insuficiente, que es un IMC de menos de 18.5. Una persona que mide 5 pies y 4 pulgadas (1.63 metros) y pesa 175 libras (79.5 kilos) tiene un IMC de 30, mientras que alguien con la misma estatura que pesa 105 libras (casi 48 kilos) tiene un IMC de 18.En investigaciones anteriores, el equipo de Peterlin encontró que el vínculo entre la obesidad y las migrañas era más firme entre las mujeres y las personas menores de 55 años de edad. El nuevo estudio confirmó esos hallazgos.La nueva revisión encontró que el vínculo entre la obesidad y las migrañas es moderado, dijo Peterlin. Es similar al vínculo observado entre las migrañas y la enfermedad cardiaca isquémica, en que el corazón no recibe suficiente sangre, añadió.Peterlin dio que no puede explicar con certeza en qué forma la composición corporal afecta al riesgo de migraña. Pero especuló que el tejido graso "es un órgano endocrino, y al igual que los demás órganos endocrinos, como por ejemplo la tiroides, un exceso o una deficiencia provocan problemas".El cambio en el tejido graso que ocurre con el aumento de peso o la pérdida extrema de peso altera la función y la producción de varias proteínas y hormonas, explicó Peterlin, lo que cambia el ambiente inflamatorio en el cuerpo. Esto podría hacer que una persona tuviera una mayor tendencia a sufrir migrañas o podría provocar una migraña, dijo.Pero el estudio solo encontró una asociación entre el peso y el riesgo de migraña, no una relación causal.La revisión aparece en la edición del 12 de abril de la revista Neurology.¿Ayudaría perder o aumentar de peso? No hay certeza, dijo Peterlin."Unos datos limitados en humanos muestran que [las personas que sufren migrañas] tanto episódicas como crónicas que son extremadamente obesas y se someten a una cirugía bariátrica por otros motivos de salud también experimentan una reducción en la frecuencia de los dolores de cabeza de más de un 50 por ciento", comentó. También se ha mostrado que el ejercicio aeróbico reduce los dolores de cabeza."Lo que no está claro es si la pérdida de peso en sí u otros factores relacionados con el ejercicio es lo que resulta en la mejora", dijo Peterlin.Una especialista en el dolor de cabeza que no participó en el estudio alabó los hallazgos.El nuevo análisis es "una adición valiosa a la literatura creciente sobre la migraña y el índice de masa corporal", dijo Dawn Buse, directora de medicina conductual del Centro Montefiore del Dolor de Cabeza, en la ciudad de Nueva York.Buse dijo que ha visto aumentar la frecuencia de las migrañas con el aumento de peso en sus pacientes. También ha visto mejoras en las migrañas tras la pérdida de peso, afirmó.Buse reconoció que, aunque perder peso parece ayudar, perder peso puede ser difícil. Los profesionales de la atención médica deben hablar con sus pacientes sobre la relación con las migrañas, y ayudarles al ofrecer educación y remisiones a tratamientos que podrían ayudar a perder peso.http://elmundotlp.blogspot.com/es