Segundo tomo de la saga The 39 Clues
Clasificación: Novela de aventuras
Edición: Destino, mayo de 2011, 11’95 €
Valoración: 4’5 sobre 5
Amy y Dan Cahill siguen con su periplo alrededor del mundo en busca de las treinta y nueve pistas que podrían conducirles a ese misterioso premio que su difunta abuela, Grace Cahill, prometía en su testamento en vídeo a los ganadores de una extraña competición. Así pues, acompañados por su “cuidadora” adolescente, Nella, viajarán a Viena y visitarán la mágica y emblemática Venecia en una aventura trepidante y repleta de obstáculos; siempre con el resto de sus competitivos y peligrosos familiares siguiéndoles la pista e intentando, por todos los medios, que abandonen la empresa. ¿Conseguirán sobrevivir a las constantes zancadillas de sus adversarios? ¿Podrán Amy y Dan seguir buscando las 39 pistas?
Gordon Korman toma las riendas de esta trama ideada y abierta por Rick Riordan, que dio comienzo en El laberinto de huesos. ¿Habrá sabido Gordon captar la esencia de los personajes y hacer que no los sintamos como extraños? ¿Habrá sido capaz de retomar la trama y hacernos olvidar que la escribe un autor distinto? Sí. Sí, sí y sí. Ha sabido, ha sido capaz. Desde la primera página Korman respeta el estilo, el lenguaje y la frescura que Riordan concibió, sumergiéndonos en el misterio y haciéndonos disfrutar, sufrir y sentir cómo el corazón nos late a mil por hora. El hecho de acompañar a los personajes a lugares diversos de todo el mundo, como la bella Viena o la maravillosa Venecia, aumenta el encanto del libro. Y aunque no se detiene a describir con detalle ninguna de las ciudades, sí que consigue, en cierto modo, hacer que las visualicemos y sintamos su energía. Además, la complejidad de la trama sigue siendo exquisita, lo que me lleva a pensar que la serie The 39 Clues podría convertirse en algo así como El Código Da Vinci para niños y jóvenes, al tratarse de una novela de misterio y aventuras en la que los datos históricos se van entrelazando para ayudar a resolver el enigma. Sin duda, un buen modo de aprender algún que otro detalle de cultura general. Por otra parte, al igual que sucedía en el libro anterior, nos quedaremos con las ganas de que se resuelva algo importante. “Eso” no sucederá, pues recordemos que la serie está compuesta por diez títulos, de los que éste es el segundo. Aun así, nos encontramos ante uno de esos libros bien escritos, con chispa, humor y que merece la pena leer. La saga no decae en este título y realmente hace que te enganches, todavía más, a la historia. Y no puedo dejar de mencionar que la competición online de la web oficial de la saga sigue en marcha, ofreciendo divertidos y educativos juegos de ingenio, donde los vencedores podrán ganar interesantes premios.
De momento la serie no decepciona. Al igual que con el título anterior, Una nota falsa hará que los lectores sigan enganchados y ansiosos por ir a por el tercer libro. Eso sí, un aviso: es estrictamente necesario haber leído el tomo anterior.