Una nueva terapia reduce el VIH en sangre sin afectar al sistema inmune

Por Fat

Científicos de las universidades alemanas de Hannover y Ulm han desarrollado un nuevo tratamiento capaz de reducir los niveles de VIH en sangre, atacando al virus antes de que éste afecte al sistema inmune, una nueva forma de combatir el virus que podría reducir los efectos secundarios que habitualmente presentan los antirretrovirales.Los antirretrovirales actualmente disponibles no sólo destruyen los virus, sino también las células del sistema inmune, en cambio, esta nueva terapia, conocida como 'VIRIP 576', ataca a los virus cuando están fuera de las células inmunitarias, en el torrente sanguíneo. Según ha explicado uno de los autores de este hallazgo, el profesor Reinhold Schmidt, en los primeros test realizados, esta terapia ha demostrado ser muy efectiva.

En estos ensayos, se inyectó la sustancia por vía intravenosa a un grupo de 18 pacientes durante 10 días, observando como la cantidad de virus disminuyó drásticamente después de cinco a seis días, lo que puede explicar que el virus apenas logró reproducirse. Además, según ha añadido el profesor Wolf-Georg Forssman, esta sustancia ha demostrado tener muchos menos efectos secundarios que otros medicamentos, ya que apenas se contaron un par de casos con erupciones cutáneas, causadas probablemente por la desintegración de los virus. De hecho, explica este experto, se tratan de efectos secundarios manejables, que desaparecen rápidamente.

Otra de las ventajas que ha demostrado 'VIRIP 576' es que los virus no pueden disminuirr su efecto adaptándose genéticamente al mismo. Según el profesor Schmidt, esta característica podría facilitar que este fármaco se emplease en pacientes que han fracasado con tratamientos convencionales, se estima que uno de cada diez afectados.El único problema que muestra esta nueva terapia es que se trata de una solución proteica que se administra por vía intravenosa, por lo que sólo puede administrarse bajo vigilancia del personal médico. Sin embargo, los autores confían en poder desarrollar este fármaco en pastillas, si bien es necesario llevar a cabo nuevos estudios clínicos para corroborar que tiene la misma efectividad que cuando se administra en vena. Confiamos en que con esta terapia se pueda tratar a aquellos pacientes que no mejoran con ningún tratamiento, asegura el profesor Schmidt, quien informa de que en una próxima fase de investigación se centrarán en este grupo de pacientes.