Una receta de tarta de guinness con la que triunfarás seguro

Por Akissofcolour @akissofcolour

Es mundialmente conocida mi incapacidad para conseguir que la reposteria con levadura suba, así que rara vez me atrevo a hacer tartas o pasteles. Por eso os aseguro que a poca gracia que tengáis con la repostería la receta que os traigo hoy seguro que os hace triunfar.

A estas alturas lo que he aprendido es que las recetas de repostería hay que seguirlas al pie de la letra y que no todas las recetas que se publican en internet tienen las proporciones correctas, así que antes de lanzarme a hacer cualquier cosa, comparo diferentes recetas. En este caso me quedé con la de Na Lua Dulce y fue todo un acierto.

Los ingredientes que necesitaremos son:

  • 250g de harina
  • 350g de azúcar
  • 3 huevos
  • 250g de mantequilla
  • 150g de nata para cocinar
  • 250ml de cerveza negra Guinness
  • 2 cucharadas de esencia de vainilla
  • 75g de cacao en polvo
  • Una chucharadita de bicarbonato

Mezclamos la nata, los huevos y la vainilla por una parte y reservamos. Ponemos a calentar la cerveza en un cazo, sin dejarla llegar a ebullición, y añadimos la mantequilla, removiendo hasta que se derrita. Añadimos la cerveza con la mantequilla a la mezcla de la nata, los huevos y la vainilla.


En otro bol mezclamos el cacao, la harina y el azúcar. Añadimos la mezcla líquida poco apoco, asegurándonos de que la masa quede homogénea. El resultado es bastate líquido.

Pasamos la masa a un molde que esté engrasado y enharinado. Metemos al horno, previamente precalentado, a 180º durante 50-60 minutos. El punto justo es el momento en el que al pinchar la tarta el tenedor o el palito de brocheta salgo limpio.

Para terminar haremos un frosting con queso de untar y azúcar glass. En teoría el frosting debería llevar la misma cantidad de azúcar glass que de queso y en la mayoría de los casos se le añade mantequilla. Yo prefiero utilizar un poquito menos de azúcar, añadir una cucharadita de esencia de vainilla y prescindir de la mantequilla. Por si queréis evitar la experimentación, aquí os dejo una receta de María Lunarillos.