Una reforma muy elegante

Por Delikatissen

Aventurarse en la tarea de reformar un piso cuya construcción se sitúa hace 100 años no es siempre fácil. Cierto es que un edificio de estos en las grandes ciudades ya ha sufrido alguna reforma más durante todos esos años, por seguridad más que nada, pero aún así, siempre es una sorpresa lo que uno se puede encontrar al tirar una pared, arreglar el baño, etc. Eso si, el resultado puede ser espectacular: un fantástico piso, elegante, lleno de personalidad y detalles en pleno centro de la ciudad.

Este piso está en Estocolmo tiene 104 m² y un montón de detalles bonitos: altos techos, puertas correderas (escondidas en la pared) y otras de doble hoja de madera, rosetones en el techo, cocina panelada (los paneles originales de 1914!) en madera blanca, ventana bahía de tres ventanales en el salón, rodapiés altos y muchos más. Los dueños decidieron pintar todo de blanco, bueno, el suelo de madera de un gris muy claro, imagino que como una solución económica alternativa a cambiarlo. Resulta en un piso muy luminoso y amplio, donde la decoración con piezas más clásicas renovadas y alguna más moderna de diseño conviven perfectamente. Espero que os guste ¡feliz lunes!

Vía: Stadshem