Un estudio realizado por
investigadores de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de Johns Hopkins
publicado en Discovery Medicine encontró
que un crecimiento lento de la bacteria Borrelia burgdorferi puede explicar los
síntomas persistentes observados en los pacientes con enfermedad de Lyme que no
se curan con el tratamiento estándar con un solo antibiótico que se usa
actualmente. La combinación de tres antibióticos (daptomicina, doxiciclina y
ceftriaxona) eliminó la infección de Lyme en los ratones del estudio. La
enfermedad de Lyme es causada por la bacteria Borrelia que vive dentro de las
especies comunes de garrapatas y se transmite a los humanos por las picaduras
de garrapatas. El tratamiento con un solo antibiótico, ya sea doxiciclina,
amoxicilina o cefuroxima, durante dos a cuatro semanas elimina la infección y
resuelve los síntomas en la mayoría de los pacientes. Sin embargo, el 20% de los pacientes continúan sufriendo síntomas
persistentes, como fatiga, dolores musculares y articulares, y niebla cerebral
que puede durar seis meses o más. Los científicos ahora esperan probar la
combinación en personas con enfermedad de Lyme persistente. La idea de
bacterias persistentes que causan infecciones severas y persistentes con
susceptibilidades variables a diferentes medicamentos podría aplicarse a otras
enfermedades infecciosas en las que los síntomas a veces persisten, a pesar del
tratamiento estándar.