“Es necesario contar con equipos sanitarios involucrados en la detección, educación y control de los pacientes con diabetes, patología cuya prevalencia en nuestro país es del 12% y que se puede considerar ya la epidemia del siglo XXI”, señala Alfonso Calle Pascual, jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. En esta afirmación, coincide Francisco Tinahones Madueño, jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria de Málaga y presidente de la Sociedad Andaluza de Endocrinología y Nutrición (SAEN): “En el momento actual nadie discrepa sobre la idea de que un programa de educación específico y constante para la diabetes es tan necesario como el tratamiento médico”.
Estos expertos defienden, al igual que las “Recomendaciones de la Sociedad Española de Diabetes 2010”, publicadas en la revista Avances en Diabetología el pasado mes de septiembre, la automedición de la glucemia capilar y el autocontrol de esta patología con el objetivo de evitar las complicaciones de estos pacientes y ahorrar, con ello, recursos sanitarios.
Sobre este asunto Edelmiro Menéndez Torre, jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y coordinador del Grupo de Trabajo de Consensos y Guías Clínicas de la Sociedad Española de Diabetes (SED), señala que “más del 90% del coste de la diabetes viene ocasionado por las complicaciones de esta patología; por tanto, nuestro trabajo debe ir dirigido a disminuir las mismas y el autocontrol es probablemente el instrumento más potente del que disponemos”. El Dr. Tinahones Madueño añade que “en el paciente que requiere un tratamiento médico intensivo (por ejemplo multidosis de insulina), el autocontrol evita que se produzcan descompensaciones metabólicas que acarrean un enorme coste tanto en visitas médicas como en absentismo laboral”.
En esta línea, el Dr. Menéndez Torre afirma que “la automedición es un instrumento que ayuda al buen control y para poder utilizarlo adecuadamente requiere un programa completo y estructurado de educación en diabetes, imprescindible si queremos lograr el autocuidado del paciente que es la única vía de conseguir que la persona con diabetes mantenga este buen control”.
Sin embargo, la situación actual de los pacientes con diabetes es preocupante ya que la mitad de ellos, subraya el Dr. Calle Pascual, están “fuera del límite que consideramos razonable, lo que es un problema severo por la aparición de complicaciones”. Además, mantiene que sólo entre el 5 y el 10% presenta un control óptimo lo que “está en función de la capacidad de los profesionales sanitarios para desarrollar programas de educación y tratamiento para motivar a los pacientes a tener adherencia a llevar un estilo de vida saludable (ejercicio físico, alimentación, etc.)”.
Llama la atención que actualmente la diabetes tipo 2 aparece a edades más tempranas. Así, son frecuentes las situaciones en las que personas de entre 30 y 40 años “dentro de un examen de salud son diagnosticadas de diabetes por una glucemia 168, sobrepeso y algún trastorno de lípidos o tensión arterial”, explica el Dr. Calle Pascual quien añade que “son enfermos a los que se les recomienda que acuden a su centro de salud y van por ello, no porque tengan síntomas”.
Este experto asegura que lo habitual es que el médico “no recomiende, de entrada, la monitorización de la glucosa capilar salvo para evaluar la eficacia de determinados fármacos; esta herramienta se debería implantar desde el principio y dentro de un programa educativo para favorecer los cambios en el estilo de vida”. Por tanto, no es recomendable retrasar su uso ya que “el paciente debe conducir desde el principio su enfermedad y si no le enseñamos a entender las oscilaciones de su glucosa no va a saber cómo controlarla lo que le puede crear ansiedad”.
-Estudio sobre el papel del autoanálisis
El jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid se encuentra al frente del equipo que está realizando, desde hace casi dos años, un estudio para comparar resultados en pacientes que realizan autoanálisis respecto a los que no lo hacen: “Hemos visto –explica- que la utilización de la glucosa capilar como herramienta educativa requiere una enseñanza para que el paciente sepa interpretar las cifras que obtiene en sus
autoanálisis, ligar los resultados a su comportamiento y mejorar de esta manera tanto su control glucémico como su calidad de vida para que su entorno laboral y familiar no se vean interferidos”.
Este experto insiste en que uno de los problemas de la diabetes, sobre todo en la tipo 2, es que el “propio paciente no se siente enfermo, sobre todo en las primeras fases, porque apenas tiene síntomas salvo que orina o bebe algo más de lo normal y el equipo sanitario debe conseguir que sea consciente de la patología y que la controle”. A ello se une que “a los profesionales sanitarios se les ha orientado para llevar a cabo una medicina curativa y no preventiva”.
Poder incluir los valores del autoanálisis en la historia clínica del paciente tiene también importantes beneficios para el facultativo ya que, según indica el Dr. Tinahones, “permitirá en el futuro contestar a preguntas que todavía no tenemos resueltas como por ejemplo si ¿la variabilidad de la glucemia es más importante que la cifras medias de glucemia para definir el riesgo vascular de los pacientes con diabetes? o ¿cuál es el valor real de la glucemia posprandial en las complicaciones de la diabetes tipo 2?”.
-La Administración debería invertir más en salud
A juicio del Dr. Calle Pascual, el tratamiento de estos pacientes debe implantarse de forma precoz. Para ello, las autoridades sanitarias tendrían que cambiar sus objetivos ya que “todas las comunidades autónomas permiten el autoanálisis sólo como recurso terapéutico para evaluar el tratamiento farmacológico, no como herramienta educativa; tienen que invertir en salud para mejorar la calidad de vida de los afectados y con ello alcanzar una rentabilidad a nivel economicista”.
Sobre este tema el Dr. Tinahones Madueño indica que “existen evidencias sólidas de en qué momento de la evolución de la diabetes el autoanálisis de la glucemia capilar es eficiente y a pesar de ello, existen divergencias en sus indicaciones del autocontrol en función de cada gobierno regional y el tema de gasto está influyendo”. Sin embargo, añade este experto, “si se aplicaran los criterios que se recomiendan no se incrementaría el presupuesto, simplemente se haría un uso más racional de esta herramienta terapéutica”.
Para ello, este experto menciona algunos ejemplos: “No tiene sentido que un paciente con diabetes tipo 2 que esté en tratamiento con dieta y tenga un buena hemoglobina glicosilada se realice autocontroles diarios fuera de un programa educativo; por contra tampoco tiene sentido que un paciente con diabetes tipo 2 y multidosis de insulina con un control irregular de su glucemia se le restrinjan las tiras reactivas de glucemia capilar”.
**PIE DE FOTO: De Izd. a dcha.: Doctor Alfonso Calle Pascual, Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid; D. Michele Pedrocchi, Director de Roche Diabetes Care Iberia y Latinoamérica; Doctor Edelmiro Menéndez Torre; Jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hosp. Univ. Central de Asturias y Coordinador del Grupo de Trabajo de Consensos y Guías de la Sociedad Española de Diabetes (SED); Dr. Francisco Tinahones Madueño, Jefe del Servicio de Endocrinología del Hosp. Clínico Univ. Virgen de la Victoria de Málaga y Presidente de la Sociedad Andaluza de Endocrinología y Nutrición (SAEN).