Utilizar o no utilizar el microondas

Por Blogdefarmacia.com

El secreto detrás del horno de microondas es un dispositivo llamado magnetrón que convierte la electricidad en ondas de radio muy cortas, lo cual es una forma de radiación electromagnética. Estas ondas hacen que las moléculas de agua en los alimentos vibren, y son estas vibraciones que producen el calor que cocina la comida. Este uso de “radiación” es el punto clave en algunos círculos cuando se trata de los efectos en la salud.

Sin embargo, no es peor que otros métodos de cocción comunes. Si bien está lleno de artículos en la web que hablan de cómo las microondas desactivan o destruyen las enzimas y antioxidantes, lo cierto es que muchos de los métodos de cocción hacen esto en los alimentos, especialmente hervir o cocinar a presión durante largos períodos de tiempo.
Tomemos, por ejemplo, el brócoli. Un estudio realizado en el año 2003 examinó este combatiente del cáncer y encontró que cocinarlo en horno microondas, hervirlo, o cocinarlo a presión durante largos períodos de tiempo redujo el contenido de flavonoides, mientras que cocinarlo a vapor mantuvo los nutrientes de manera casi intacta.

Por otro lado, los hornos microondas son estrictamente regulados por la FDA. La clave es asegurarse de utilizar recipientes aptos para microondas, como el vidrio y la cerámica, y evitar los plásticos, metal y aluminio. Calentar en el microondas los alimentos en recipientes inadecuados podría causar que los productos químicos potencialmente dañinos se filtrasen desde el contenedor hasta la comida, o en algunos casos (como el aluminio) provocaran chispas o fuego.

En última instancia, cocinar la comida en el horno microondas es una elección personal. Puede encontrar un dispositivo clave para ayudarte a preparar una variedad de alimentos saludables a pesar de un estilo de vida agitado.