(Vanessa Gera y Adam Goldman, AP, 27/10/2010)
Funcionarios polacos que investigan una prisión secreta de la CIA que operó en este país le otorgaron el estatus de víctima a un sospechoso de terrorismo, dijo el miércoles su abogado Mikolaj Pietrzak.
Expertos señalan que la decisión de Polonia reconoce la validez de los alegatos de Abn al-Rahim al-Nashiri, quien dijo fue maltratado por los interrogadores en la cárcel.
Al-Nashiri, un hombre de Arabia Saudí acusado por el bombardeo del barco de guerra USS Cole en Yemen en el 2000, fue aprehendido por Estados Unidos, llevado a prisiones ocultas en Polonia y Tailandia y sometido a un trato violento, según ex funcionarios de inteligencia estadounidenses que pidieron no ser identificados. Actualmente se encuentra encarcelado en Guantánamo.
"Aunque esto es un importante paso adelante, aún queda por ver si el fiscal polaco avanzará seriamente con la investigación", dijo Amrit Singh, miembro de la Iniciativa Justicia de la Open Society, que busca garantizar la protección de los derechos humanos.
Funcionarios polacos que estaban en el poder cuando la prisión operaba en el país europeo aún niegan su existencia, pero el nuevo estatus de al-Nashiri debilita su posición y aumenta la posibilidad de que algunos puedan ser algún día acusados de abuso de poder.
Adam Bodnar, un abogado de la Fundación Helsinski para los Derechos Humanos en Varsovia, dijo que el estatus de víctima de al-Nashiri le dará a sus abogados el derechos de participar en los procesos, una ventaja pragmática. La decisión, agregó, también señala que los fiscales creen que hay evidencia para sustentar los alegatos de al-Nashiri.
"El otorgar ese 'estatus de víctima' significa que la fiscalía está en gran medida convencida del argumento que fue detenido y llevado ilegalmente al territorio de Polonia", dijo Bodnar. "Que los argumentos y hechos presentados por los abogados son probables".
De acuerdo a una moción presentada en Polonia el mes pasado, los abogados de al-Nashiri le piden a los fiscales de Polonia que llamen a varios ex dirigentes de la CIA a testificar así como a pilotos de vuelos que transportaron a los sospechosos.
Ex funcionarios de inteligencia estadounidenses han señalado que la CIA operó una prisión con el código "Quartz" en el norte de Polonia de diciembre del 2002 a finales del 2003.
Activistas y los abogados de al-Nashiri alegan que éste fue torturado en Polonia y que se le negó un juicio justo por nueve años.