Así que como es habitual, están planificando un viaje a Egipto para contactar con proveedores y ver in situ el proceso de fabricación. En mi empresa, desde hace unos años, tienen muy en cuenta los procesos de fabricación de sus proveedores, y que éstos utilicen medios y recursos que ayuden a la sostenibilidad del medio ambiente.
Por otra parte, este año la cotización del algodón ha subido bastante, por lo que es importante llegar a acuerdo de compra venta que nos permitan no estar expuestos a los cambios posibles de cotización del producto para la próxima temporada.
Y a que no adivináis en quién han pensado para hacer esta misión comercial. Pues, sí, a una servidora. Hacía tiempo que estaba esperando que me designaran un proyecto de este tipo, y por fin ha llegado.
Así que ese mismo día hice todos los preparativos para el viaje y el miércoles a medio día salí para el Cairo.
Después de pasar por el hotel para dejar el equipaje, refrescarme un poco después del viaje, me vino a buscar el contacto comercial que tenemos en esa zona para invitarme a cenar en un restaurante típico de allí.
La velada discurrió de forma muy agradable, me comentó que en este momento la explotación de algodón en Egipto para por un momento de crisis, debido principalmente a que los agricultores optaron por otros tipos de cultivo ya que la subida de los precios de los fertilizantes y la carencia del agua para la irrigación eran algunos de los problemas a los que se enfrentaba el campesino para cultivar algodón; lo que ha producido que haya descendido la cosecha de algodón de alta calidad. Y por otra parte, después de esto años de crisis mundial, es año se ha producido un aumento muy considerable de la demanda de algodón de Egipto, y los agricultores no han previsto este aumento de la demanda, con lo cual han perdiendo la oportunidad de cultivar más y vendar más. El algodón de Egipto, es conocido como el “oro Blanco”, pues su calidad es única en el mundo, por sus fibras son más largas, que al realizar el hilado consigue un tejido mucho más suave.
Después de esta puesta al día sobre la situación de la oferta y demanda del mercado del algodón de Egipto, y puesto que estaba cansada del viaje, me acompañó al hotel y quedamos para el día siguiente para ir a visitar las fábricas y reunirnos con sus responsables.
Posteriormente nos mostraron la fábrica y pudimos ver cómo se desarrollaba todo el proceso. Aunque está bastante mecanizado, sin embargo sigue habiendo una importante intervención de la mano del hombre, y la verdad era impresionante ver cómo trabajaban con la fibra y al final el resultado que se alcanzaba.