Viejo y hermoso

Por Chocobuda
Foto: Fine Art America.

En Japón cuando una taza de té tiene una cuarteadura o alguna imperfección, se le considera un objeto hermoso. Eso significa que la taza ha sido creada por manos humanas, y que la persona imprime en el objeto su propia imperfección. Al mismo tiempo, una taza cuarteada o despostillada implica que ha estado realizando bien la función para lo que fue creada.

Al mismo tiempo, las grietas y rupturas de una taza nos recuerdan la naturaleza impermanente de las cosas. A esto se le llama Wabi Sabi. Es una visión de la vida derivada de la enseñanza budista de las Tres Marcas de la Existencia; Impermanencia, Sufrimiento y Ausencia de Yo.

Aunque cuando leemos o vemos videos sobre esta postura japonesa ente la vida, nos parece hermoso e inspirador, la realidad es que las culturas hispanas tenemos poco respeto o admiración por las cosas viejas. Y claro, esto lo extrapolamos hacia las personas.

Pocas veces valoramos el servicio y la ayuda que nos ha dado esa camiseta vieja, la vajilla que solo botamos o la televisión que se tiene que ir. No es que debamos aferrarnos a las cosas, es solo que no las vemos con gratitud y mucho menos con respeto.

Una de las aportaciones más grandes que Dogen Zenji dejó al budismo universal, fue la realización de que todo es Buda. No solo los seres sintientes, sino que la piedra, tu camiseta vieja, tu cacerola despostillada y hasta el vidrio roto de la venta; todo es Buda. Absolutamente todo lo que nos rodea es parte de una sola cosa enorme e indivisible.

Todo es Buda en el exterior y en el interior. Tú eres Buda siendo una taza rota de Buda que usa el Buda para beber té, que también es Buda. Tus ojos que necesitan lentes son Buda observando al Buda, siendo la córnea del propio Buda, mirándose al espejo de todos los Budas.

Apreciar Wabi Sabi es dar valor profundo y espiritual al Buddhadharma porque así como la taza de té se vuelve vieja, nosotros también (Impermanencia).

Así como la taza de té tiene que pasar por pruebas enormes para desarrollar su función, nosotros también (Sufrimiento).

Así como la taza de té no pide ser llamada Doña Taza de Té, nosotros somos mucho más que el simple nombre en el pasaporte. Somos seres vivos anónimos que aportan a la vida de los demás seres (Ausencia de Yo).

Wabi Sabi es entender que las Tres Marcas de la Existencia nos rigen y nos ayudan a ver la realidad en una escala más refinada y elegante. Esto nos lleva a sentir profunda gratitud por los seres y los objetos que lo dan todo para que nosotros estemos bien.

Al final solo eres un Buda viejo y hermoso, cumpliendo su función de Buda en la alacena de los Budas.