Y siempre regresa, a mi memoria,
el tierno silbo imaginario
de las sombras rasgadas...
Desde ningún lugar
hacia ningún sitio,
porque de sombras es
el recinto sin cierres donde se avanza;
mientras el mudo destello de los grises
se abre en lo ignoto
llevando hacia La Nada otra silueta.
Breves torbellinos de penumbras
tornan inasibles los instantes
en el ansia espectral de un horizonte...:
Ayer, Hoy o Mañana
son cuerpos que se hunden
en un frío pantano de silencios.