(EFE, Varsovia, 11/11/2011)
Los enfrentamientos entre policías y manifestantes nacionalistas y anticapitalistas en el día de la independencia dejan 30 heridos.
Los enfrentamientos entre policías y manifestantes nacionalistas y anticapitalistas han protagonizado la celebración del día de la independencia polaca en Varsovia, donde la jornada se saldó con más de 200 detenidos, una treintena de heridos, varios coches quemados y cuantiosos daños materiales.
La tradicional marcha nacionalista que cada 11 de noviembre recorre las calles de la capital polaca se encontró con una protesta antifascista. Entre algunos de ellos se encontraban grupos de activistas llegados desde Alemania y Bélgica, según la policía, mientras que en la otra movilización participaron colectivos de Serbia, Ucrania y República Checa.
“Es una vergüenza que los alemanes vengan a Varsovia para evitar que los patriotas de este país podamos demostrar en nuestras calles nuestro amor por Polonia”, explicó Marek, uno de los jóvenes que participó en la llamada marcha del 11 de noviembre, quien insistió en el carácter patriótico y no nacionalista de su movilización.
Inicialmente la marcha anticapitalista discurrió con normalidad, entre bailes, canciones y pancartas contra el sistema económico. Un fuerte despliegue policial acompañó a ambas marchas, aunque no pudo evitar que el centro de Varsovia se convirtiese en escenario de una auténtica batalla campal,.
Varios vehículos fueron apedreados e incluso quemados por los manifestantes, entre ellos dos pertenecientes a la cadena de televisión TVN, objetivo habitual de las críticas de los grupos polacos de extrema derecha, que acusan a este canal de “antipatriota”. El presidente de Polonia, Bronislaw Komorowski, ha pedido que se inicien acciones legales contra los organizadores de ambas marchas.