VIPHOTO 2014: mostrar, vender, compartir

Por Photosatriani @artimprove

Después de haber anunciado mi participación en la feria fotográfica VIPHOTO, me gustaría compartir algunas consideraciones sobre la experiencia vivida en Vitoria Gasteiz durante el fin de semana del 14-15-16 de Noviembre. El juicio global es sin lugar a dudas muy positivo; antes de todo porque “hacer” algo, es siempre estimulante y fuente de aprendizaje…ahora por ejemplo se mucho más de montaje (clavos, martillos, marcos, etc.)…

..he podido aprender algunas cosas sobre la conservación fotográfica, sobre todo gracias a Jabi Soto que se ha prodigado en darme consejos sobre materiales y técnicas de conservación. La Sala Amárica en la cual se ha tenido la feria es muy, muy bonita: amplia, bien iluminada y gestionada impecablemente. El número de fotógrafos seleccionados ha sido el apropiado para el tamaño de la sala; el espacio a disposición de cada participante era amplio y nos hacía sentir muy a gusto.

La organización del evento por parte de la Sociedad Fotográfica Alavesa, ha sido a la altura: mucha gente en la inauguración, bastante gente durante el sábado y el domingo; muy buen rollo con los organizadores, cosa que nos ha empujado a hacer migas entre los participantes; de esta manera, además de exponer y vender, nos hemos vuelto con algún amigo más con los cuales compartir inquietudes artísticas.

Lo que más me ha gustado de la experiencia ha sido el contacto directo con muchísima gente que se paraba en mi sitio y preguntaba, apreciaba, se maravillaba, comentaba; de esta manera se obtiene un “feedback” directo e inmediato sobre cómo la gente percibe tu obra: que gusta más y que gusta menos y porque lo que gusta menos no atrae la atención de la gente; se entiende también si los “rollos mentales” que montamos alrededor de nuestra imágenes, el así llamado “concepto”, alcanza ser transmitido; se reciben además puntos de vistas diferentes sobre una misma imagen. Por encima de todo eso (¡que no es poco!), personalmente he tenido además suerte y he vendido tres libros y cinco fotografías (dos de la serie Ikebana, una Polaroid transfer, un árbol solitario, y un árbol especular). No era mi principal objetivo, pero de vez en cuando está bien alimentar no solo el alma si no también…el estómago.

Una sugerencia que he dado a la organización es que he echado de menos la presencia de galeristas; la totalidad de la gente que venía era gente que ama la fotografía y que además la consideran como una opción de regalo o de decoración. Mi sugerencia es la de reservar un par de horas (quizás antes de la inauguración) para la visita exclusiva de galeristas y otras entidades interesadas al arte y a la fotografía. Para una audiencia como la que ha habido, es normal que cualquier propuesta que supera los 15€, cuesta dar el paso y comprarla. Por lo tanto, mi consejo para quien quiera proponerse a eventos de este tipo es de acompañar la propuesta de contenido y más costosa con algo preparado expresamente para la feria, a un precio bajo y con un bonito packaging, como por ejemplo han hecho, con gran éxito de ventas, Noemi Calvani con sus Flipbooks o TheISOfamily con DAD and MOM.

De los 12 participantes, menciono las propuestas llevada por: Xabi Lumbreras con sus grandes fotos tomadas de noche con exposiciones muy largas; el Gasteiz Atelier que proponía un dialogo visual entre dos fotógrafos en el cual la impresión manual añade un extra-valor a las imágenes; TheISOFamily que mezclaba fotografía con dibujo; Josean Pablos (ganador de la edición del 2009 de Caminos de Hierro) con sus espejismos; Critóbal Benavente con sus cajas de colores.

La semana que viene el post será dedicado a la portuguesa ciudad de Porto…