Visita al Salón del Chocolate de Moda Shopping

Por Javie



La visita al Salón del Chocolate que, en su séptima edición, se ha celebrado este fin de semana en Madrid, me ha dejado como, en anteriores ocasiones, un sabor agridulce, y no es porque dicho sabor me parezca deleznable, que lo valoro y lo aprecio en sus justos términos, sino que utilizándolo en sentido metafórico, creo que son todos los que están, pero no están todos los que son. Y sobre esto no voy a opinar, pues cada uno sabe, o debe saber, porqué acude a un evento o deja de acudir, y porqué las grandes marcas y resto de empresas importantes en el sector del chocolate, se implican o dejan de implicarse con su inasistencia, a determinadas citas. En fin, ahora que ya se confirma la no celebración, finalmente, del Salon du Chocolat en Madrid, previsto para este mes. Parece que lo anterior tiene bastante sentido.Así las cosas, sí puedo y debo contar, que sólo por algunos de los escasos, por otra parte, participantes ha merecido la pena la visita. Pues, aunque sólo sea por conocer el trabajo del maestro de Nunos: José Fernández-Ramos, sobre el Séptimo Arte (fotos de arriba), ya compensa la visita, en la conversación que he mantenido con él (donde sigue demostrando el mismo entusiasmo y cariño por su oficio), me ha informado de la próxima presentación, probablemente en la Casa de América, de su última creación, la marca de chocolate propia denominada: Gosor Noir, con cacao de Tanzania, México y Saothome, y que he tenido la ocasión de probar, con un 72,9 % de cacao mínimo, y del que hablaré cuando lo presente, para no adelantar acontecimientos.Y ya que hablamos de entusiasmo, el que contagia, sin ningún género de dudas, como siempre: Esther Sánchez, su acreditada vida, a pesar de su juventud, entregada a la profesión de pastelera, como ella se define, y su proyecto en KUNA YALA, y la puesta en marcha prevista para mañana marte de su tienda online. Junto, con el no menos entusiasta socio; Chistian Kobylanski, e incluso hasta el novio de Esther; A.J. Luque, informático y reinventado pastelero, hacen que siga creyendo en el futuro del sector, gremio u oficio, o como quiera que lo llamemos. Pues ellos, por su juventud, sus ganas, su entusiasmo, y su inteligencia, son los llamados a dignificar la profesión y situarla donde debe de estar, lejos de absurdos 'divismos' y otras 'peculiares historias', que no sean: que la pastelería de nuestro país, no se quede detrás y avance, como en el resto de los países de nuestro entorno, y produzca un 'salto de calidad' similar al mundo de la cocina, del vino,....etc. Que sin duda servirá, para que otros más jóvenes los sigan en el futuro, por simple mimetismo.También quiero destacar, los trabajos realizados en los talleres que se han llevado a cabo durante el Salón, y entre ellos, el realizado por Tino Helguera (foto de abajo) de la Casa del Chocolate de Gijón, alusivo a la soberbia, representado en una señorita, toda ella, en chocolate blanco. Y al que a su importante trabajo como maestro pastelero, añado su capacidad como escultor, que como digo considero muy destacable.