Para formar cada una de las cáscaras se emplearon "triángulos" recortados de una misma esfera. Cada uno de estos triángulos está construido a partir de nervios pretensados de acero que a su vez son sustentados por arcos metálicos que han sido montados previamente. Hay que mencionar que el arquitecto de la Opera de Sidney abandonó Australia y nunca llegó a ver concluida su obra. En 1999, cuarenta y dos años después del inicio del proyecto, aceptó una invitación del gobierno australiano, y a dia de hoy co-dirige conjuntamente con su hijo, las obras de remodelación de los interiores. El creador de la Opera de Sydney gana el equivalente en arquitectura al premio novel; el danés Jorn Utzon ganó el premio Pritzker de arquitectura, considerado el Nobel para esta disciplina, por haber diseñado la célebre Opera de Sydney.
La ópera ofrece dos tours en caso que queráis visitarla por dentro, el essential tour con una hora de duración (35$), y el backstage tour, que dura dos horas (150$).
Si queréis más información, podéis visitar la página oficial (en inglés): Página Oficial