Vivir en un contenedor

Por Sanchezdi

Si así, a voz de pronto, te decimos que nos encantaría vivir en un contenedor, probablemente pienses que nos hemos vuelto completamente locos. Pero, si te enseñamos esta imagen y os decimos que esa espectacular casa está realizada con algunos contenedores marinos…

¿Despierta vuestra curiosidad?

Este tipo de casas cuya estructura está compuesta por contenedores marinos se comenzaron a fabricar en países como Reino Unido u Holanda hace ya algunos años. Hoy forman incluso urbanizaciones.

Los recursos naturales son limitados y, de seguir al ritmo que llevamos, más temprano que tarde llegará el momento en que se agoten. Es este uno de los motivos por los que edificar siguiendo una arquitectura sostenible que utiliza materiales de bio-construcción, es una apuesta que cada vez pisa más fuerte y gana presencia  en Europa.

Las ventajas de este tipo de construcciones son múltiples. Quizá la más evidente y llamativa es la reducción de los costes de fabricación gracias a que se edifican con una base estándar.
Pero no sólo el precio de la vivienda se reduce, también se reducen notablemente los tiempos de construcción… Construir una vivienda de similar tamaño y características a una vivienda tradicional, requiere de menos de la mitad de tiempo. Y es que la remodelación y armado de una caja metálica se puede realizar entre 20 y 60 días (dependiendo de las necesidades del cliente y el grado de dificultad).

Con tanta ventaja, podríamos caer en el pensamiento negativo de que algo malo debe haber. Y quizá lo primero en lo que podríamos pensar es en la comodidad y la calidad, que se podrían ver afectadas. Pues bien, las compañías dedicadas a ofrecer este tipo de arquitectura, aseguran que en ningún caso este tipo de construcción no influye de manera negativa en las comodidades ni en la calidad la vivienda; de hecho, aseguran que los acabados son de igual o superior calidad que los de cualquier construcción tradicional.

Este tipo de construcción se desarrolla sobre una solera de hormigón. De esta manera, se pueden apilar hasta trece contenedores marinos capaces de soportar condiciones meteorológicas muy adversas. Y, una de las características más interesantes de estas construcciones es que consisten en un sistema modular que permiten ampliar la vivienda de la manera que deseamos y cuando lo deseemos.

Y vivir en un contenedor no tiene por qué ser una opción informal, también se pueden crear con contenedores viviendas glamurosas y elegantes. Este es otro de los motivos por los que esta opción gana cada vez más adeptos y su demanda crece a pasos agigantados.

Las posibilidades son infinitas, tantas como se puedan imaginar. Y este tipo de casas van desde pequeñas viviendas, hasta casas más espaciosas que requieren de varios contenedores encastrados…