Galería, tienda y hogar. Eso es es lo que os muestro en el post de decoración de hoy.
La casa pertenece a una ceramista que tiene montada en ella su estudio, además de una galería en la que muestra tanto su trabajo, como el de otros artistas, y también tiene su hogar. Sin duda un aprovechamiento maravilloso del espacio, que compró completamente destrozado y que con paciencia reconstruyó.
La casa, como no podía ser de otra manera, está llena de libros y de piezas de arte, creadas por el propio dueño y por otros artistas. Pero, a pesar de lo que pudiera parecer, el hecho de estar rodeados de obras de arte no hace del espacio un lugar en el que da miedo moverse por si algo rompe, al contrario, le da un toque acogedor, a la vez que ecléctico al lugar.
Mi estancia preferida es, sin duda, el salón, con las paredes oscuras y esos sofás en granate.
Créditos: Thedesignfiles.