Aunque en sus orígenes fue una confitería artesana, dedicada a la elaboración de las conocidas Yemas de Santa Teresa, único producto al que se dedicaban. Después de 150 años , cuentan con 35 productos y 80 referencias. Productos naturales sin conservantes, ni aditivos, pero con larga caducidad, para lo que necesitan siempre el frío para poder conservarse. Desde la Flor de Castilla en 1860, han transcurridos 150 años, como decía, y hoy estamos ante una empresa moderna con una filosofía, que la misma califica de tradición + innovación. Efectivamente, las yemas quedaron como el origen, y el nombre de la empresa, tras 130 años. Pero su evolución, durante estas dos últimas décadas, fundamentalmente por el esfuerzo de Julián Gil, abogado que colgó la toga, y actual propietario, ha conseguido una gama de productos dulces y salados, con un nivel de calidad absolutamente estimable. Huevo hilado, membrillo, mayonesa, gazpacho,
bechamel, pasteles de pescado,
quiches,........etc. Puedo asegurar, que antes de comprar una mayonesa, un gazpacho, una
bechamel, no tengo ninguna duda y prefiero 'mil veces' hacerlo yo. También puedo asegurar, con la misma firmeza, que las salsas frías, las salsas calientes, el pastel de pescado, y algún que otro elaborado de Santa Teresa, que he comprado y consecuentemente e utilizado, es de lo mejor que se puede encontrar en el mercado. Con unos niveles de calidad muy superiores a la media que se ofrece en este tipo de elaborados, y con las características y el sabor de los mejores. Normalmente la gama de productos de Santa Teresa se encuentran en las mejores tiendas, además de las 3 tiendas en Ávila, en Madrid, tienen una en el barrio de Aravaca, avenida Osa Mayor nº 92, y la tienda
on line.http://www.yemasdesantateresa.es/