Hoy regresamos a los héroes tanquistas, concretamente a un héroe alemán condecorado con el título de héroe de la Unión Soviética a título postumo. Un héroe anónimo, del cual perfilamos unas breves notas sobre su vida, pero
no obstante recordad que podéis elegir el tener dicha biografía completa (seguramente la más completa jamás escrita en castellano) de este héroe de guerra como recompensa siendo Patrocinador de este blog. ¡y todo desde un dólar! No te olvides de visitar para más información y descubrir más sorpresas exclusivas: www.patreon.com/heroesdeguerraPero antes os quisiera recordar que ya podéis seguirme en Twitter, soy @DelhRoh o a través de Facebook en mi página oficial de "seguidores". Podéis acceder a mis respectivos sitios pinchando aquí:- Mi cuenta de Twitter.- Mi página de Facebook.Ganus, Feodosi Grigorievich. Debido a la incesante necesidad de soldados y especialistas Feodosi G. Ganus y muchos alemanes como él, que habían sido menospreciados y apartados de sus antiguos puestos en el ejército volvían a sumarse al esfuerzo bélico soviético, a pesar de que Stalin les había dado la espalda. Ganus, fiel a su compromiso volvió a su antiguo puesto y unidad.
Varios de los aeropuertos ya habían caído en manos rusas y solamente quedaba un aeródromo bajo control alemán, uno que era llamado “El Criadero”. El pesado tanque KV-1 del joven sargento de origen alemán estaba en la vanguardia del ataque, y pronto las bajas comenzaron a acumularse en el bando alemán. El KV-1 consiguió dejar fuera de combate en pocos momentos a cinco tanques enemigos y mientras el combate continuaba se destruyeron 24 carros de infantería enemiga, además de una cantidad indeterminada de piezas de artillería y morteros, lo que hizo que los alemanes huyeran despavoridos de la posición fortificada conocida como «Novaya Nadezhda». El mérito de la toma de aquel importante punto estratégico era obra del KV-1 de Ganus.Pero, desafortunadamente, el pesado tanque KV-1 fue impactado por varias armas ligeras que destruyeron sus cadenas y lo dejaron inmovilizado, aunque a pesar de ello continuó disparando. Finalmente, no mucho tiempo después, el tanque se quedaba sin municiones. En ese momento, cuando el tanque dejó de disparar los alemanes gritaron a los tripulantes del tanque para darles la opción de rendirse. Del interior del tanque surgió una voz poderosa, que en perfecto alemán dijo:
«¡Los rusos no se rinden!»
En ese momento el interior del carro comenzó a arder con sus ocupantes dentro, pues se habían inmolado tras rociarse con gasolina para evitar ser capturados mientras en el interior se oía a los hombres cantando la Internacional. De esta forma morían los 5 tripulantes, al grito de: ¡Los rusos no se rinden!
- Video-historia de Feodosi G. Ganus realizado por el autor de este blog -