1° Llamamiento de Mujeres Originarias por el Buen Vivir

20 octubre 2014

Energía ancestral que despierta

Por Josefina Garzillo

Fotografías: Danpeople[1]

Sábado 11 de octubre. Son las seis de la tarde en el microcentro porteño. De espaldas al monumento a Julio Argentino Roca, militar y ex presidente que comandó el genocidio contra los pueblos originarios al sur del país a fines del siglo XIX, formamos una ronda para que circule la palabra.

“Qué difícil llegar hasta aquí, desde el corazón de la tierra de la Patagonia”. Una voz suave toma el micrófono y su saludo nos acerca. Estamos en el 1° llamamiento de las Mujeres Originarias por el Buen Vivir, una iniciativa que busca reunir a miles de personas en una marcha que se planea para abril del 2015, cuando las comunidades presenten ante el Congreso de la Nación un Proyecto de Ley por el Buen Vivir pensando y escrito desde y para las comunidades.

Este encuentro fue el 1° llamamiento para unirnos a todo el trabajo que hará falta para llegar al año próximo con el proyecto y la presencia de muchas más mujeres de todas las comunidades del país.

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Estamos a pocos metros de la Casa Rosada, lugar que Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo -Línea Fundadora también presente en esta ronda, definió como el “centro de la macro riqueza”. Desde la organización anuncian “estamos sin escenario porque Macri lo negó y con un sonido hecho por compañeros. Esperamos en abril poder hacer esto de otra forma”. Hay que decirlo: poco se sintieron esas faltas. Con la calidez que caracteriza a la gente que prioriza los encuentros a los espectáculos, dibujaron un círculo hecho de hojas verdes sobre la calle asfaltada, con líneas de tierra y flores cruzándolo. Y ahí quedamos todos envueltos: integrantes de comunidades, de asambleas ambientales, de medios de comunicación comunitaria y demás personas autoconvocadas para apoyar esta causa.

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Una a una las mujeres van hablando. En cada una está la realidad social de un pueblo, su cultura y su historia. Teresa trae su sabiduría desde Cuzco, Perú para compartirla en la ronda de la misma manera con que la practica en la Academia de Lengua Quechua que funciona en La Plata. “Saludo con todo mi corazón a esta tierra sagrada de Argentina, Buenos Aires, agradezco reencontrarme con las mujeres. En nosotras está la fuerza y la energía para este gran cambio del nuevo Pachakuti. Es necesario que recuperemos el sentido de comunidad, que nos sanemos a nosotros mismos como seres para oponernos a las transnacionales que destruyen el vientre del que todos venimos que es la Madre Tierra. El futuro es de esperanza, no de lamentación, y será desde el campo y la ciudad unidos”.

Más allá de las geografías, las demandas de los pueblos hoy corporizadas en las voces de las mujeres coinciden rotundamente: No más megaminería contaminante, No más soja que nos expulse, No más asesinatos por defender el territorio.

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Cuando Nora Cortiñas tomó la palabra, recordó: “Después de los ’70 acá dejaron el terrorismo económico, ese se llevó a nuestros hijos e hijas porque molestaban. Por eso es importante que sigamos en la calle diciendo Basta de beneficiar a Chevron, a Monsanto, porque matan en serio, no decimos fantasías. El glifosato no es fantasía”. Antes de saludar, aprovechó para reconocer el trabajo de las Madres de Ituzaingó y la asamblea de Malvinas Argentinas, que desde Córdoba luchan contra el avance de la multinacional Monsanto.

El grito “30 mil detenidos desaparecidos ¡Presentes!” al que nos invita Nora antes de despedirse se mezcla con el sonido del ñorkin, un instrumento de viento de origen mapuche, que suena de algún punto del círculo que formamos. En ese cruce de símbolos las causas se hermanan. La exigencia de una justicia integral da fuerzas y aviva la llama.

La elección del lugar no fue casual. Encontrarnos por delante de ese monumento tiene que ver con la exigencia de una reparación histórica aún pendiente: que el Estado reconozca el genocidio, el robo de las tierras y lo demuestre en actos como remover ese bronce en homenaje a Roca; causa que   es llevada adelante desde hace años por las comunidades con el acompañamiento y el impulso del historiador Osvaldo Bayer, que también está de pie en este círculo de voces. 

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“Marimari. Mi nombre es Moira Millán, soy la coordinadora de la 1° Marcha de Mujeres Originarias de Argentina”. Moira, hija de la Patagonia, arranca nuestra breve entrevista saludando en mapudungun, la lengua mapuche. Mientras va y viene alrededor del círculo, recibe gente e invita a otras mujeres a acercarse al micrófono, cuenta que la logística para que las hermanas de otras provincias estén hoy en Buenos Aires fue muy cuesta arriba. Ella es “Con este llamamiento buscamos generar una movilización multitudinaria el año que viene cuando presentemos un proyecto del Buen Vivir que va a modificar sustancialmente la vida no sólo de las comunidades sino de todo el pueblo argentino”.

Los objetivos del proyecto son, entre otros, establecer una relación de reciprocidad entre el Estado argentino con las naciones originarias, instalar no solamente en la agenda política sino también en la social la propuesta del Buen Vivir y articular la propuesta del Buen Vivir para todos los habitantes a través la creación de un Consejo Ministerial Indígena, autónomo y con verdadera representatividad de las naciones originarias.

Lo destacable es que las bases se están construyendo de manera comunitaria y participativa a partir de una serie de talleres que varias mujeres vienen realizando desde agosto de 2013 en distintas comunidades en conflicto del país. “Ahí las hermanas hacen un diagnóstico de su realidad, cuáles serían las demandas y las propuestas dentro de la ley”, explica Moira y agrega “esta va a ser la primera ley que se elabore de manera directa por nosotras, no desde ningún tecnócrata pensándolas y calculamos que para febrero de 2015 ya vamos a tener el texto resuelto después de haber recorrido las provincias que nos quedan visitar”. El paso siguiente es juntar más de un millón de firmas para acompañar la presentación del proyecto en abril de 2015.

Para más información sobre la campaña:

http://mujeresoriginarias.com/el-proyecto/

[1]   Fotógrafo y comunicador de La Plata. Integra los proyectos Norte Profundo, Intervenir LP, La Joda Teatro, Volver a Habitar y Ediciones de La Caracola.